Jimin es un omega huérfano que es subastado, pero no cuenta con que el príncipe Jeon sea su comprador.
🌷Kookmin.
🌷No acepto adaptaciones de ningún tipo.
🌷Solo mayores de 18, ya están advertidos.
🌷Vas a sufrir, pero hay final feliz.
🌷Borrador, s...
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Hoseok aterrizó con violencia sobre un tronco, su cuerpo tenso y alerta. La luz de la luna había cambiado, tiñéndose de un rosa pastel inusual. En su mano, el rastreador parpadeaba, indicándole que estaba a pocos pasos del enigma prometido. Agudizó sus sentidos, avanzando con cautela, como si el bosque mismo le susurrara secretos.
Finalmente, lo encontró: un cuerpo inerte, yacía en el suelo. Su rostro se contrajo en sorpresa y dolor. ¿Había llegado tarde?
Se puso de cuclillas frente a Jimin, tragando saliva preocupado y asombrado ante las marcas de distintos dientes en su cuerpo, había sufrido bastante de eso no había ninguna duda.
—¿Qué te hicieron? —preguntó en un susurro.
En ese instante sacó de su bolso un frasco de cristal que contenía la flor rosa que había crecido en el invierno, el color de los pétalos era idéntico a la luz de la luna y a los ojos de Jimin. Hoseok no sabía qué hacer, solo siguió su instinto, así que colocó un pétalo encima de cada herida del omega, encima de cada mordedura, llenándolo de pétalos por todas partes.
La luz de la luna se filtró a través de los pétalos de la rosa haciendo que el cuerpo de Jimin absorbiera los pétalos y con ese acto cada herida fue desapareciendo ante la vista de Hoseok quien observaba con asombro la escena. Una sonrisa genuina formándose en sus labios.
El cuerpo de Jimin se elevó en el aire un par de centímetros, sus labios comenzaron a llenarse de color, al igual que sus mejillas, el corazón que había dejado de latir comenzó a bombear sangre y sus pulmones se llenaron de aire.
Un suceso mágico y único en el mundo.
Su cabello creció de un momento a otro, llegándole más abajo de los hombros y sus músculos aumentaron un poco el tamaño al igual que su estatura, incluso su cintura que era muy estrecha se ensanchó. Su vientre fértil cambió, ahora era infertil pues un enigma puro no podía llevar vida en su interior. Además sus venas brillaban en un intenso color rosa y en su espalda apareció una luna creciente del mismo color de sus venas.
Al abrir los ojos soltó un grito desgarrador, y en lo único que pensaba era en aquel amor perdido que no lograba recordar pues todos sus recuerdos habían desaparecido junto con el omega que alguna vez fue.
Se miró los dedos asustado y al ver a Hoseok corrió entre los arbustos ocultándose atrás de un enorme árbol porque estaba desnudo.
—Hola, soy Hoseok... Un enigma al igual que tú —dijo acercándose a él con pasos lentos—. En mi mochila tengo ropa. ¿Quieres vestirte?
—Sí quiero.
La vozde Jimin era poderosa, clara y fuerte. Resonando en los tímpanos de Hoseok quien estaba fascinado. ¿Eso era ser un enigma puro? Rápidamente sacó unos pantalones color café y una camisa blanca de la mochila al igual que ropa interior entregándosela a Jimin. Las venas rosas que centelleaban en su cuerpo poco a poco se iban regulando dejando de brillar.
