BLACK ROSE ⭑ hwang hyunjin

viii. confess

CAPÍTULO OCHO: CONFESIÓN 

⠀⠀Los días posteriores parecían ir en medio de una larga brecha de tiempo, muy apenas podía ver a Hyunjin incluso si ambos trabajaban en la misma empresa; aunque siempre había tiempo para mandar mensajes al otro, siempre le daba los buenos días y buenas noches, contestaba tan pronto como le era posible sus mensajes. 

⠀⠀La verdad más blanca que acallaba y solo mente y corazón eran conocedores; anhelaba su respuesta y al menos hablar por unos minutos con él.

⠀⠀—Owen, hola. 

⠀⠀—Hola, Hyejin ¿puedo ayudarte en algo?

⠀⠀—De hecho sí —asintió con firmeza, relamió sus resecos labios—. Yo finalmente tomé el valor necesario para hablar contigo, así que me preguntaba si podríamos hablar en privado— pidió, sus manos temblaban ligeramente, era el nerviosismo recorriendo su cuerpo entero. Su corazón latía desembocado, la adrenalina fluía en cada partícula de ella arrasando sin piedad con su valentía. 

⠀⠀Ella suponía la respuesta, presentía cuál sería. Sin embargo, quería averiguarlo de la persona de su interés; tenía una oportunidad para ser correspondida o simplemente no había cabildo para ella en su corazón o mente. 

⠀⠀Al final, ella tenía sus propias razones para hacerlo, para finalmente hacerlo. 

⠀⠀Owen dudó por un par de segundos, aunque ciertamente para Hyejin fueron bastante largo para hacerle batalla a la eternidad. Incluso cuando quiso negarse, no pudo dar una respuesta negativa al verla pues al final, podía entender aquella sensación que poco afable era. 

⠀⠀—Claro.

⠀⠀Hyejin sonrió levemente, se giró sobre sus propios talones antes de comenzar a caminar. Su amiga le ayudó a encontrar un lugar lo suficientemente privado para no provocar alboroto. —Está sala de práctica no se usa a estás horas. 

⠀⠀Owen quiso decir «Lo sé.» no obstante reservó aquellas palabras para sí mismo. La sala de prácticas que solían utilizar algunos miembros de Stray Kids durante una parte de la mañana y otra en la tarde.

⠀⠀—Primero quiero agradecerte por haber venido aquí conmigo, creo que por la distancia que mantienes debes suponer de qué trata. Si no es así, te lo diré —con firmeza aclaró su garganta, finalmente lo observó a los ojos y se sinceró:— Comenzamos siendo interpretes de personajes creados por alguien hace ya un tiempo, lo único que sentí por ti en el momento fue admiración. No nos volvimos a ver después de haber dado vida a un par de papeles con pocas apariciones y diálogos. Pero hace tiempo que mi admiración dejó de ser solo eso, mi atención se veía dirigida hacía ti, sé en qué momento sucedió porque prevalece en mi memoria.