Capítulo 17 Que oportunos...

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Después de la impresionante exhibición de aeromodelismo, Marcos y Jessica se dirigieron a la academia, un lugar repleto de atracciones relacionadas con la aviación. El cielo aún estaba despejado y la energía del evento parecía contagiar a todos los presentes.

La academia tenía de todo: simuladores de vuelo, exposiciones de aviones antiguos y modernos, y hasta una sección interactiva donde podías construir y lanzar tus propios modelos de aviones. Marcos y Jessica paseaban entre las atracciones, disfrutando de cada momento.

"¿Quieres probar el simulador de vuelo?" preguntó Jessica, sus ojos brillando con entusiasmo. Llevaba su chaqueta de cuero marrón que contrastaba con la luz del sol, haciéndola lucir aún más radiante.

Marcos sonrió, divertido. "¿Estás segura de que puedes manejarlo? No quiero que termines estrellándote."

Jessica le dio un empujón juguetón. "¡Ja! Ya veremos quién se estrella. Apuesto a que te ganaré en cualquier carrera."

Entraron en el simulador de vuelo, una cabina cerrada que recreaba la experiencia de pilotar un avión de combate. Marcos se acomodó en el asiento del piloto, mientras Jessica tomaba el de copiloto. Las pantallas se encendieron y el paisaje virtual se desplegó frente a ellos.

"Listo para despegar, capitán," dijo Jessica en tono solemne, haciendo un saludo militar exagerado.

Marcos rió. "A tus órdenes, teniente. Agárrate bien."

El simulador cobró vida, y la cabina se movió como si estuvieran en un verdadero avión. Volaron a través de montañas y valles, evadiendo obstáculos y haciendo maniobras acrobáticas. Jessica gritaba y reía, emocionada por la experiencia.

"¡Cuidado con ese árbol!" exclamó Jessica, señalando la pantalla.

"Tranquila, tengo todo bajo control," respondió Marcos con confianza, esquivando el obstáculo con facilidad.

Salieron del simulador con una mezcla de adrenalina y risas. "Eso fue increíble," dijo Jessica, aún con una sonrisa en el rostro. "Deberíamos hacer esto más seguido."

Marcos asintió. "Definitivamente. Aunque creo que en la próxima carrera tendré que dejarte ganar para que no te desanimes."

Jessica le dio un leve golpe en el brazo. "¡En tus sueños, Müller!"

Continuaron explorando la academia, deteniéndose en una exposición de aviones antiguos. Jessica se detuvo frente a un biplano rojo brillante. "Siempre he querido volar en uno de estos," confesó, tocando suavemente el ala del avión.

Marcos la miró con curiosidad. "¿En serio? Pensé que preferías los aviones modernos."

"Esos también me gustan," admitió Jessica, "pero hay algo romántico en estos aviones antiguos. Me imagino volando sobre campos verdes, como en las películas."

"Bueno, tal vez algún día podamos hacerlo realidad," dijo Marcos, su voz suave.

Jessica lo miró, sus ojos llenos de emoción. "¿Lo dices en serio?"

"Por supuesto," respondió Marcos, tomando su mano con suavidad. "No hay nada que no pueda hacer con mi tecnología."

Pasaron el resto de la tarde bromeando y coqueteando, disfrutando de cada atracción que la academia ofrecía. Sin embargo, la atmósfera festiva se rompió abruptamente cuando varios vehículos militares entraron al área con rapidez y determinación.

Soldados armados empezaron a dispersarse por el lugar, creando una tensión palpable. La multitud se quedó en silencio, observando con preocupación cómo los militares requisaban teléfonos celulares y ordenaban a todos eliminar cualquier video de la exhibición de Marcos.

Tengo Un Sistema De Actualización (I Have  A Upgrade System)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora