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J  A  Y

Las chicas entraron a nuestra habitación, sorprendidas por todo lo que teníamos, tal parece nuestra habitación es mejor que la de ellas, al fin algo bueno.

Mientras Carlos está jugando algo en el televisor, pero me llama para que lo pruebe. En ese momento mal nos llama la atención.

– chicos!! Olvidan nuestro plan?

– hada madrina, bla bla bla, varita mágica, bla bla bla, sacar a nuestros padres de la isla, bla bla bla – contesté mientras jugaba, ganándome una risa de Carlos e Evie.

– esta es nuestra oportunidad de demostrarnos ante nuestros padres...– todos nos giramos a verla – de demostrarles que somos malos, despiadados, inhumanos y crueles.

Nos quedamos un segundo pensativos y estáticos, queríamos demostrarles a nuestros padres que éramos igual o peor, que ellos que seríamos su legado el día que ya no estén, pero yo personalmente no quería esa vida para mí, y sabía que ellos tampoco. Yo menos aún sabiendo que la chica de mis sueños si existía, que estaba aquí en Auradon. Ella es igual a como la soñe, sonrisa encantadora, poca paciencia con quién lo merece, amable, tratando de ayudar a los desafortunados. Era ella, era su cabello largo, negro y liso, sus ojos marrón oscuro, con una mirada que te penetraba el alma, era ella, es obvio que no tengo idea de la definición de amor, pero sabía que había algo en mí que hacía quererla, y que ella me quiera.

Mal le llamo la atención a evie, para que usará su espejo y buscará la varita mágica.

– espejito espejito... En mí mano, la varita del hada madrina, quiero – encegida el espejo nos mostró la varita pero estaba demasiado cerca para ver donde estaba.

– está demasiado cerca

– espejito no tan cerca – ok este espejo estaba loco, ahora parecía que nos mostraba desde el espacio – acercalo, acercalo, acercalo, alto! – nos mostraba un museo hay es donde estaba la varita.

– está a unos dos kilómetros – dijo Carlos mostrando el mapa en la laptop.

Nos pusimos encegida en marcha para poder irnos a buscar la varita. Al llegar nos encontramos con que había un guardia vigilando. Pero lo que más nos dio risa fue que estaba en plena entrada la rueca de maléfica.

– esa... Es la rueca de tu madre – dije en tono de burla y chiste, algo que molesto a mal.

– es mágica, no tiene que verse siniestra– rebuscó en el libro de su madre un poco para luego decir unas palabras – mágica amiga, llegó la hora que mí víctima se duerma ahora.

Y el guardia no hizo nada solo se quedó mirando la rueca sentado en el lugar – WOW que miedo – mal volvió a rebuscar para volver a decir otro hechizo.

– ok ahora verán... Pincha su dedo, pincha y quema, que mí enemigo luego se duerma – y ahora sí funcionó, el guardia se durmió profundamente.

Mal quiso abrir la puerta, pero no pudo. Les dije que se apartaran para después hacerme un poco para atrás y tomar carrera, pero Mal no tuvo mejor idea que usar justo un hechizo y no avisarme. Quedé como tonto pateando a la nada y cayendo sobre mí trasero.

Lo siguiente que hicimos fue buscar la sección de la varita, pero primero nos encontramos con una parte en donde había unas estatuas de nuestros padres y por más que quisiera no dejaría que nos quedáramos a mirar eso, asique les hice seña para que siguiéramos. Pocos metros después encontramos la varita.

Baje hasta donde estaba y quise tomarla, pero había un campo de fuerza a su alrededor que me hizo volar y casi caer de cara. De pronto comenzó a sonar una alarma muy fuerte y tuvimos que salir corriendo.

– muy bien Jay, mañana tendremos que ir a la escuela– me regaño Mal y pues la verdad tenía razón ni ganas de ir a una tonta escuela, pero si era lo que debíamos hacer, entonces que así sea, les seguiremos el juego.




































































En cuanto llegamos a nuestras habitaciones nos adentramos para que nadie sospeche nada. Carlos y yo nos acomodamos para dormir, la verdad no me quejo, las camas son mucho más cómodas que en la isla y la comida también es buena. En la isla todo eso no suele ser bueno, ni siquiera las estructuras de las casas son lo suficientemente resistente, si no estuviera la barrera es muy probable que las mareas altas ya hubieran derribado la mayoría de ellas.

Me gire a ver a Carlos y el ya estaba dormido, agradezco que por lo menos el puedo dormir y la verdad se sentía raro no compartir cuarto con las chicas.

Tarde un rato largo en dormirme, pero en cuanto pude cerrar los ojos, Soñé lo mismo que cada noche. Esa chica, de hermosa sonrisa, cabello negro y ojos marrones, esa chica a la que por fin le pude poner un nombre: Aluna. Era ella, de alguna forma era ella.

Ni siquiera se por qué soñaba con ella, pero desde que se lo eh hecho, eh soñado con ella y no me canso de hacerlo, de alguna forma era lo que rondaba mí mente día y noche. El por qué? No lo sé, quizás así se siente estar enamorado?? Quería saberlo, pero tampoco sabía si ella sentía lo mismo, o si incluso soño con migo como yo con ella.

Pero aún que fuera solo un sueño, ahora la tenía allí frente a mí sosteniendo mis manos mientras me guiaba, llevaba puesto un vestido blanco con delantal negro y una capa de color rojo con capucha, parecía caperucita Roja sin duda alguna. Y sin darme cuenta llegamos a una hermosa cabaña en el bosque.

– está era la cabaña de la abuelita – su angelical voz calmada hablaba, era como estar en la vida real.

– por qué usas la capa roja? –

– el rojo ayuda a repeler al lobo – contesto calmada con una sonrisa.

– que tu papá no era el lobo? – la condición en mí voz la hizo soltar una risita que la hizo ver tierna.

– no ese lobo– se sacó la capa mirando hacia abajo – este lobo – lo siguiente que pasó fue que levanto la cabeza y sus ojos brillaban en un dorado divino y luego... Solo me desperté exaltado.

"Que fue lo que pasó?" Me preguntaba, que fue eso? Acaso puede hacer eso? Ahora en mí cabeza rondaban algunas preguntas, hasta donde mis sueños solo eran sueños y hasta donde podrían ser verdad.










































Holiiiis, eh aquí el segundo capítulo de está historia

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Holiiiis, eh aquí el segundo capítulo de está historia. Espero y les esté gustando.

Sin nada más que decir solo les mando un saludote y que sean muy felices y coman perdices.

Cualquier cosa que quieran ver en la historia o lo que sea que tengan para comentar estaré agradecida y expectante a sus comentarios y/o mensajes, los quierooo💋❤️

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