SOFTCORE | ʜᴇʟᴀᴇɴᴀ ᴛᴀʀɢᴀʀʏᴇɴ

ix. the candle night

IX. LA NOCHE DE VELAS

MARATÓN 3/?

Helaena Targaryen era tan sola una niña de catorce días del nombre, cuando tuvo que casarse con su primo Rhaegar Targaryen. Catorce días del nombre y ahora era una mujer casada. 

Al inicio de la ceremonia se mantuvo en calma incluso cuando su hermano Aegon hizo un desagradable discurso acerca de la noche de velas o más conocida como la luna de miel, Pero simplemente lo que obtuvo fue una represaría por parte de su madre y abuelo. 

La ceremonia había sido algo sencilla y privada, los únicos presentes fueron los Velaryon y todos los Targaryen posibles y Rhaegar  el cual solo había dicho unas palabras y fue al momento de repetir las mismas palabras que ella. 

— Yo soy tuyo y ella es mía desde este día hasta el fin mis días.  

Se casaron bajo la influencia de los siete gracias a la orden de su madre, causando la molestia de varios incluso la de Rhaegar quien no se quedo callado al decir que prefería la religión de sus Dioses  siendo secundado por Daemon e incluso Rhaenyra pero al final fue el rey quien intervino diciendo que el así lo había decidido. 

Rhaegar estaba a nada de dormirse en su asiento de lo aburrido que era la cena incluso cuando era visible los bandos, quedando su ahora esposa y el en medio de ambos. No pudo resistir mas tiempo levantándose, alertando a todos quienes lo miraron extrañados. 

 — Les agradezco a todos por su presencia pero creo que es hora de que me vaya a la cama — Dijo mirando a todos encaminando directo a la salida sin embargo fue interceptado por Otto Hightower, Rhaegar no pudo evitar preguntarse ¿Cómo es que había caminado tan rápido? 

— Mi príncipe ¿ No se le olvida algo? —  pregunto con una sonrisa de oreja a oreja. 

Rhaegar giro mirando a la mesa con el seño fruncido y por fin lo entendió.  — Por supuesto — murmuro y con una sonrisa de acerco a la mesa para darles un beso en la cien a sus hermanas Baela y Rhaena — Hermanas, descansen y sueñen con dragones 

Dijo caminando devuelta a la salida y al pasar por un lado de Otto menciono — Gracias Sr Otto casi se me olvidaba.

— No mi príncipe  — dijo, no, casi grito Otto — La noche de velas — murmuro con mas calma 

— Padre —  dijo Alicent levantándose de su lugar caminando hacia los dos hombres. —  ¿No crees que es demasiado pronto? Helaena apenas es una niña. 

—  Pero que cosas dices Alicent — hablo mirándola como si le hubieran salido cuernos —  La difunta Reina Aemma tenia la misma edad que Helaena cuando tuvo su primer embarazo.

Ante tal declaración fue Rhaenyra quien se interpuso haciendo que la situación fuera mas incomoda. — Mi madre si tuvo su primer embarazo a esa edad sin embargo fue algo sumamente riesgoso. Acaso ¿Quiere lo mismo para su nieta, Sr Otto? 

— Para nada princesa pero es lo que dictan las costumbres

— Costumbres, son una porquería — dijo Daemon posicionándose a un lado de Rhaenyra mientras miraba con burla a hombre que mas odiaba — Ninguno de nosotros tiene el derecho de elegir. La única que puede aceptar es la misma princesa.

Helaena se asustó al sentir todas las mirabas en ella, su abuelo la veía casi ordenandole que aceptará mientras que su madre la miraba en espera a que se negase.

Respiro profundo, sabía que si aceptaba evitaría un castigo Pero si se negaba podía asegurar que su abuelo la encerraría en la torre más alta al regresar a Kings landing.

— Yo… si es una costumbre no creo que la podamos romper ¿No es así? — pregunto nerviosa.

— Bueno, la niña ha hablado — dijo Daemon mirando a Rhaegar quien también lo miraba pidiendo ayuda. Si algo había aprendido en Pentos fue a respetar a las mujeres y jamás sobrepasarse con una menor. No. Eso no era lo que Laena le había enseñado.

— ¡Perfecto! — grito Viserys quien por fin hablaba después de la incómoda situación — Hija, sobrino, los veremos en el desayuno.

Después de eso fue Rhaenys quien los guío a la habitación que les tenía preparada, mirando con pena a Helaena al verla entrar.

— Buenas noches — susurro cerrando la puerta.

La habitación había Sido decorada con velas que iluminaban escasamente y la cama había sido adornada con sabanas y cortinas nuevas.

Ninguno de los dos se movió o emitió algún ruido creando un silencio extrañamente cómodo.

— Helaena — llamo a la joven quien se había sumido en sus pensamientos — No tenemos que hacer nada. Se que aceptaste Pero no haremos nada.

Aquello había llamado totalmente la atención de hel quien esperaba lo contrario. — ¿No?

— No — repitió Rhaegar mirando a su alrededor en busca de un sillón. — Yo dormiré en aquel sillón y tú… puedes dormir cómoda en la cama, mañaba partiremos a Pentos a primera hora.

— ¿Pentos? — pregunto Helaena girando a mirarlo con extrañes — Mamá no menciono ningún viaje

— Nosotros partiremos a Pentos con la excusa de que queremos privacidad después se nos ocurrirá algo. — dijo acercandose al sillón sentándose, era solo de uno y estaba seguro que mañana amanecería con dolores. — Tienes un dragón ¿No es asi?

Pregunto mirandola fijamente, causando incomodidad en la menor quien simplemente asintió bajando la mirada.

— Perfecto — Murmuró con una sonrisa por fin regresaría a su hogar. — Recuerda. Mañana al alba partiremos.

• ──────────── • 

Papi suegro defendiendo a su ahora Nuera es top 🙏🏻

En fin, buenas noches
Voten y comenten
Los quiero muchoooo 💗