ii. goodbye Rhaegar

3.2K 423 9
                                    

═════ ≪ °❈° ≫ ═════

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

═════ ≪ °❈° ≫ ═════

II. ADIÓS RHAEGAR



Rhaegar estaba sentado en el suelo a un lado de su madre y el no paraba de hablar sobre las precauciones que deberían tomar sobre el pronto nacimiento del bebé.

—Me encuentro bien Rhaegar—dijo la Velaryon acariciando su vientre—No tienes de que preocuparte, siento que el pequeño dragón no nacerá hasta dentro de dos semanas.

—Lo se madre pero hay algo aquí — dijo señalando a su pecho—Que me dice que algo no va bien.

—Voy a estar bien Rhae pero necesito pedirte algo— Laena miro a sus hijas las cuales estaban muy entretenidas con el pequeño dragón de juguete — Quiero que me prometas que si no llego a sobrevivir en el parto te encargues de cuidar a tus hermanas.

— No puedo hacerte tal promesa por qué tú vas a estar aquí con nosotros y el pequeño también lo estara — dijo levantándose para poder sentarse en la silla que estaba a un lado de donde se encontraba la morena.

—Si yo llego a morir Daemon se alejara de ellas y tú deberás cuidarlas — Rhaegar estaba a nada de hablar pero ella levanto una mano y inmediatamente el se trago sus palabras— Y si llegas a tomar a Helaena como tu esposa cuidala, amala. Apenas es una niña y creo que tú ya eres mayor para saber que es lo correcto y que no lo es.

—Claro — Sabía que pelear con la mujer no era lo más adecuado y menos en el estado que estaba.

—Yo misma te crié y estoy orgullosa del hombre en el que te has convertido, sigue así y serás el mas respetado de todos los reinos. — dijo tomando su mano y dando pequeñas caricias para calmarlo. — Es tarde ve a la cama y lleva a tus hermanas contigo.

El asiento y se levantó dirigiéndose a sus hermanas.

—Vamos pequeñas dragonas es hora de ir a la cama — ambas se levantaron y antes de irse cada quien a sus habitaciones, se despidieron de su madre deseándole buenos sueños.

—Rhaegar — llamo al peliblanco el cuál giro a mirarla — júralo

—Lo juró— dijo forzando una sonrisa.

—Esta bien, adiós Rhaegar ten buenos sueños.

—igual tu.

(...)

Rhaegar permanecía en su habitación, sentado en una de las grandes ventanas mientras leia un libro sobre la antigua Valyria.

La puerta se abrió dejando ver las melenas blancas de sus hermanas, alzo la cabeza y  las miro con confusión, espero a que alguna de ellas hablara.

—¿Podemos dormir contigo hermano? — pregunto Rhaena con cierto miedo en su voz

—¿Tuvieron otra pesadilla?

—Mamá entro en labor — le dijo Baela y el se levantó dejando a un lado el libro. —Sus gritos son desgarradores y se escuchan aún más en nuestra habitación.

—Acuestence— las menores le hicieron caso y se acostaron en la gran cama y el las arropó.

Salió de la habitación rezando a los dioses para que todo saliera bien.

Sabía que la mujer Velaryon era demasiado fuerte pero después de la pesadilla que tuvo hace una luna su confianza en ella fue disminuyendo y el rezaba para que nada de lo que soño se hiciera realidad.

Cuando llegó a la habitación de su padre se desespero al ver que ninguno de los dos se encontraban solo estaban los maestres y las doncellas.

—¿Dónde estan? — pregunto mirando al Maestre.

—Mi príncipe lady Laena escapó y el príncipe Daemon fue tras ella.

Rhaegar estaba furioso pero no iba a perder el tiempo peleando con un maestre, salió de la habitación buscando a sus dos padres.

Los busco por todas partes hasta que llegó al pateó y ahí vio algo que jamás olvidaría.
Vio como Vaghar quemaba a la mujer que lo había criado, que lo habia amado, que lo abrazaba cuando era un niño asustadizo.

Trato de acercarse pero Daemon lo detuvo y lo pego a su cuerpo abrazándolo mientras el maldecía a los dioses. Permanecieron en el patio hasta que el alba ya salía, entonces el recordó la promesa que le había hecho a la mujer y se soltó del agarre de su padre y ambos entraron.Tenían que decirle a sus hermanas y eso lo destrozaba, eran muy pequeñas para que ambas sufrieran una gran perdida.

Ver llorar a sus hermanas menores le rompió el corazón y tal como lo había dicho Laena, Daemon ni siquiera se acercó a consolarlas solo se fue dejando a sus hijas alli.

Rhaegar atrajo a las gemelas hacia el y las abrazo hasta que ambas niñas cayeron dormidas.

___________________________________

SOFTCORE | ʜᴇʟᴀᴇɴᴀ ᴛᴀʀɢᴀʀʏᴇɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora