Dos

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    2. Una semana

-Ya fue suficiente.-Rosé arrojo la servilleta de su regazo a la mesa y tomo a Lisa de la muñeca arrastrándola a los baños.
-Lisa, por favor, yo se que estas enojada con todos, te entiendo, tu perdiste a tú mamá, yo perdí a mi papá, pero, ya han sido años, y ellos están intentando seguir adelante y ser felices, ¿puedes dejar de ser tan egoísta?-Lisa apretó los puños desviando la mirada, Rosé llevo su mano al mentón de la castaña para que la mirara.

-No soy egoísta.-Susurro Lisa y Rosé sonrió.

-Cariño, mira a tu padre.-La castaña miro a la mesa, donde su padre parecía secar el sudor de sus manos en sus piernas, movimientos discretos, pero señales claras de nerviosismo.
-El intenta ser feliz, tu madre partió hace quince años, y nadie tomara ese lugar, mi padre, nadie ni siquiera tu padre tomara su lugar, ellos solo intentan hacerse compañía, por favor, tienes que tenerle paciencia.-Lisa volvió su mirada a Rosé.
-También está aprendiendo a vivir, también es su primer vida.-La rubia acaricio dulcemente el rostro de Lisa.
-¿Me prometes que te comportaras?-La mas alta puso los ojos en blanco.
-Bueno, ¿me prometes quedarte callada cuando tu padre se ponga de pecho para que le respondas con sarcasmo?-Lisa rió por primera vez.

-Bien.-Dijo con desgana la castaña.

-Gracias.-Rosé se levanto un poco para besar la mejilla de Lisa y volvieron a la mesa, aunque Rosé se sentía cómoda con los mayores, sabía que Lisa no, así que decidió apresurar todo.

-Bueno, ¿cual es el motivo de esta reunión?-La rubia comenzó a disfrutar su comida actuando lo mas natural posible.

-Si, eso, de hecho, quería pedirte, de hecho era contigo con quién quería hablar, es decir, con todos, pero.-El hombre parecía muy nervioso.

-Prueba esto Lisa.-Lisa abrió con miedo la boca, la rubia amaba toda la comida y solía darle los alimentos que no le gustaban, así que solía sufrir la mayoría de las veces, para su sorpresa, su paladar disfruto el sabor ácido y ligeramente picante.

-¡Mmm!-La castaña abrió nuevamente la boca y Rosé sonrió dándole mas alimento.

-Bueno, Rosé, me gustaría pedirte, tu permiso para casarme con ru madre.-Ambas quedaron paralizadas, Rosé con el tenedor en la boca de Lisa y la castaña con la boca abierta.

-¡Vaya! ¡felicidades!-Dijo Lisa con dificultad y Rosé de inmediato saco el tenedor.

-¿Enserio? ¡Muchas felicidades!-Rosé sonrió y todos comenzaron con los abrazos.

-Gracias.-Dijeron los padres con sonrisas tímidas.

-Después de cinco años, al fin era el momento.-Rosé se sintió orgullosa de la castaña, pareció sincera.

-Bueno si están de acuerdo con que nos casemos, les gustara la idea de que sea en Hawai.-Lisa mostró todos sus dientes mientras asentía muchas veces, era una completa Casanova, y chicas en bikinis era el cielo para la castaña.

-Enferma.-Le dijo Rosé reconociendo la mirada de la castaña.

-Por favor, necesitaremos su ayuda, tienen que venir con nosotros en la organización.-Pidió la madre de Rosé.

-Por mi suena perfecto.-Lisa fue la primera en hablar claro que organizar la boda, no era su plan precisamente.
-Dame las fechas para organizar mi agenda.-La castaña abrió la boca esperando Rosé le diera de su comida, la rubia puso los ojos en blanco y lo hizo.

-Si también necesito fechas.-La rubia cansada de alimentar a la castaña se alimento a si misma.
-Toma tu el tenedor.-Gruño Rosé.

-Esta semana, podríamos irnos mañana, y volveríamos en una semana, bueno, ustedes, nosotras regresamos en un mes después de nuestra boda.-Dijo el padre de Lisa.

-No, de ninguna manera papá, yo no puedo ausentarme una semana, ni siquiera debería estar aquí.-Lisa habló exhalada.

-Por primera vez estoy de acuerdo con Lisa, tengo mucho trabajo, pacientes que no puedo dejar sin mas.-Rosé estaba preocupada.

-Por favor, chicas, por una vez, dejen las cosas de dinero y trabajo aun lado, la familia primero.-La rubia puso rápidamente la mano en el brazo de Lisa, para evitar dijera algo rudo contra su padre.

-Esta bien, que Jisoo traiga a su esposa y que le ayude.-Lisa hablo relajada y luego quito la mano de Rosé de su brazo.

-Veré que puedo hacer, quizá yo llegue en dos días.

-Por mi suena bien, verte en bikini se me caerán los huevos y mi amigo se caerá.-Se burlo Lisa.

-¡Lisa!-Gritaron los tres al unísono.

-Lisa, por favor, trata bien a Rosé al final, será tu hermana.-ambas pusieron cara de asco.

-Hermanastras, y ya ni siquiera podría relacionarnos, porque no es como que nos veamos.-Rosé parecía desesperada por evitar tener algún tipo de relación con Lisa y la castaña no difería.

-Exacto.

-Pues navidades seria lindo pasarlos juntos, podemos ir a la cabaña de big bear, y más adelante ustedes llegando con sus parejas y luego con sus hijos.-La mamá de Rosé hablaba con emoción, pero para Lisa y Rosé, no era algo qué querían imaginar.

-Bien, yo me retiro, tengo mucho trabajo si nos iremos una semana a Hawái, ¿Nos vamos Chae?-La rubia de inmediato se puso en pie asintiendo.

-¿Nos envían la información del vuelo y el aeropuerto por texto?-Pregunto Rosé.

-¡Claro que si!-Dijeron los padres de las chicas mientras salian del restaurante, Lisa y Rosé caminaron al auto de Lisa.

-¿Me quitas esto? Estoy por ahogarme.-La rubia soltó una pequeña risita.

-Ven aquí.-Rosé quito la corbata de Lisa y la doblo cuidadosamente, luego le quito el chaleco.

-¿También el chaleco?

-Si, eres como un niño de dos años, el chaleco y la corbata es parte del kit de emergencia de Lisa.-Se burlo la rubia.
-Andando, que tenemos mucho trabajo, y mucho que empacar.-Lisa abrió la puerta para dejar subir a la mas baja y luego subió al auto.

Hermanastras (Chaelisa Gip)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora