The Triad. 끝 | Yoonmin

11

  Cuando ambos llegaron a la casa ya habían sacado a los dos intrusos y los habían metido en la cámara de torturas.

Los sirvientes estaban inquietos corriendo de un lado a otro haciendo sus deberes y Jimin seguía en los brazos de Yoongi el cual lo cargaba como si nada.

El alfa pidió ambas togas a la sirvienta y sin más se fueron a solas a aquel lugar relajante.

Yoongi dejó a Jimin suavemente en el suelo y lo ayudó a desnudarse lentamente mientras lo miraba fijamente a sus hermosos ojos morados.

—Eres tan lindo... — dijo mientras lo acariciaba por todos lados una y otra vez.

Cuando lo tuvo totalmente desnudo Yoongi tomó su trasero  con una mano y con la otra sacó suavemente el plug que tenía adentro sonriéndole con picardía. Jimin gimió sintiendo como la semilla de Yoongi salió de su interior escurriéndose al ser liberada.

— Y un muy buen chico.— Volvió a hablar Yoongi y el omega le sonrió cálidamente.

Jimin se lanzó a sus brazos besando sus labios suave pero profundamente, como si este se fuera a ir en cualquier momento.

— Me encantas... — musitó el omega y continuó besándolo finalmente dejando un pequeño besito en su mejilla y en toda su cara soltando una risita.

Yoongi le sonrió en respuesta ayudando al ave a entrar en el pozo mientras él comenzaba a desvestirse bajo su mirada. Sus músculos estaban tensos y realmente necesitaba descansar un poco al lado de Jimin, ese omega se había ganado absolutamente todo con él. Sin embargo Yoongi aún dudaba si en realidad sentía lo mismo y quería quedarse a su lado después de todo.

Cuando terminó se metió dentro junto a su omega y sonrió un poco ido en su cabeza. Podía confiar en él... Había aceptado su marca... ¿Y si todo sólo era un acto de manipulación para ganar su confianza? Yoongi gruñó para sus adentros haciendose enojar así mismo.

Jimin no podía ser de ese tipo, no podía. Y si lo fuera nunca lo dejaría ir, se quedaría a su lado para siempre hasta el día en que muera.

Jimin notó su incertidumbre a través de su aroma, acarició su rostro, viendo al alfa algo distraído y frunció un poquito el ceño.

— ¿Estás bien? — preguntó mirándole fijamente, analizando cada detalle de su rostro.

La brisa movía suavemente el bambú alrededor de las aguas termales haciendo aquél distintivo sonido y moviendo levemente el cabello del omega quién miraba fijamente a Yoongi en sus brazos.

— Te ves más estresado que yo...

Yoongi solamente frunció el ceño y no dijo nada. Su mente estaba en otro lado y aunque todo se trataba de Jimin no sabía cómo manejar la situación.

Yoongi miró a Jimin a los ojos y sus ojos brillaron una vez más dominantes.

— Nunca vas a poder salir de aquí si sigues haciéndome esto — Su voz sonó dura y amarga. — Espero estés listo para llevar una vida criminal con un pie en la tierra y otro en el infierno.

Jimin rió levemente según negaba.

Escapar... se había olvidado completamente de eso, no era algo que estaba en sus planes a ese punto.

— ¿Por qué querría irme? — soltó dejando un besito en la comisura de sus labios, luego olfateandolo.

— Mi alfa está aquí y espero con ansias su marca. — dijo como si nada pues era lo que sentía.

Así mismo continuó hablando.

— Yoongi, quiero que me marques durante mi celo, quiero vivir a tu lado sin importar cuánta sangre corra o a cuantos hagas sufrir, eres mío.