VIII.- Una pequeña historia del pasado

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Derek solo suspiro. ¿Por qué Stiles no podía ser más normal? Aunque no era que le desagradara, le gustaba que fuera de esa manera, pero jamás lo diría en voz alta.

— No seas payaso y cuenta.

— Para eso tengo que comenzar por el principio, con la historia de un niño que perdió todo su mundo en una noche.

*

Mieczyslaw Genim Stilinski, el hijo mayor del matrimonio Stilinski Gajos era conocido por ser un niño genio e increíblemente amable y sonriente. Según los demás el pequeño iluminaba todos los lugares a los cuales entraba.

Stiles, como le decían por su abuelo paterno, no le daba importancia a lo que los demás dijeran de él. Al niño solo le importaban sus papis y su hermanito pequeño.

— Mami, mami. ¿Puedo cargar a Stu?

Claudia sonrió con ternura al ver a su niño de seis años viendo con amor y cariño al pequeño Stuart, su segundo hijo.

— Claro que puedes, pequeña travesura, pero recuerda que tienes que hacerlo con mi ayuda.

— Sí, sí.

Stiles daba pequeños saltitos mientras su mami sacaba al pequeño Stuart de su cuna.

*

— Espera... ¿Tenías un hermano? Nadie me lo dijo.

— Porque es algo que no van contando por ahí, ahora no me interrumpas, joven amo. — lo golpeo levemente en la frente mientras sacaba una fotografía más pequeña y se la entregaba al adolescente.

En ella se podía ver a un Stiles de siete años sentado en el césped con un bebé de un año castaño de ojos azules.

*

Stiles amaba su familia, a todos, pero una tarde de abril cerca de su cumpleaños estaban en el parque cuando el pequeño Stuart fue arrebatado de sus brazos.

— ¡Stu! — gritó el pequeño Stiles corriendo detrás del auto que acaba de llevarse a su hermanito después de golpearlo a él y a su mami.

— ¡Mica!

Noah llegó asustado al ver a su hijo y su esposa con heridas. Ese día la familia Stilinski no se dio por vencida y comenzó la búsqueda del menor.

*

Stiles de diez años se encontraba sentado en la comisaria, sus papis ya no estaban con él así que solo frunció el ceño al ver a una mujer acercarse a él junto con uno de los compañeros de su papi de la policía.

— ¿Van a seguir buscando a Stu? — les preguntó Stiles limpiando sus lágrimas.

El hombre, Harry, se agachó hasta quedar a la altura del niño.

— Sí, Sti. Vamos a seguir buscando a tu hermano, pero tienes que prometerme que vas a ser fuerte. Trataré de visitarte, ¿ok?

El niño asintió. Ya le había explicado todo así que solo siguió a la mujer de sonrisa "amable".

*

Para cuando Stiles cumplió los quince años ya era un experto peleando y lo hacia con todos los que se atravesaran en su camino. Al principio solo lo hacía para defenderse de los niños que se burlaban de él o quería aprovecharse de su situación. Lo mismo le pasaba dentro de los orfanatos y ahora en las casas de acogida.

Nadie lo que quería así que no se esforzaría. Además... ¿quién iba a querer a un adolescente problema? Él no quería tener otra familia, él tuvo una familia y aún tenía a su hermanito aunque no lo hayan encontrado, él sabe que esta con vida.

El Niñero de la MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora