—¡Craig! ¡Abre la puerta!—
Con prisa el pelinegro abrió la puerta dejando entrar a Token y Clyde que venían corriendo. Estando ya dentro, en un lugar seguro, trataron de recuperar el ritmo calmado de su respiración.
—¿Qué fue lo que pasó esta vez?— preguntó serio el pelinegro.
Tweek y Jimmy acababan de salir de la cocina, estaban haciendo panqueques para el desayuno.
—Bueno... es una historia complicada— mencionó Clyde.
—¿Consiguieron la miel?— preguntó el rubio.
Craig miró a su novio sin entender. ¿Miel?
Token rió al recordar lo que habían pasado por un poco de miel.
—El oso te manda saludos Tweek— mencionó el dueño de la casa.
Tweek soltó un chillido de sorpresa y preocupación. Jimmy pasó su mano por la espalda para calmarlo.
—¿Oso? Explíquense— Ordenó Craig.
—Bueno...—
Flashback
—Tweek, ¿que harás de desayunar?— preguntó Clyde parándose a un lado de Tweek en la sala.
—¿Por qué asumes que cocinaré yo?—
—Eres el único de los cinco que sabe cocinar. ¿Que harás?—
Tweek suspiró.
—Supongo que panqueques—
—¡Bien! ¡Token, Tweek hará panqueques!—
Token asomó su cabeza por el pasillo y luego su mano con el pulgar arriba. También se escuchó la protesta de Craig desde el cuarto, pues este aún seguía durmiendo.
Tweek y Clyde fueron a la cocina, encontrándose con Jimmy.
—Amigo, Tweek hará panqueques— avisó Clyde.
—Bueno idea. ¿P-pero hay mermelada o miel?—
Tweek comenzó a buscar en los cajones y nada. Clyde levantó los hombros sin entender. ¿No se suponía que está era una casa de ricos?
—Hagan los panqueques. Traeré la miel—
—T-ten cuidado— dijo el otro castaño.
Saliendo de la casa Token lo detuvo.
—¿Qué harás?—
—Buscar miel—
—Iré contigo—
Ambos caminaron por el bosque en busca de algún panal de abejas. Serían cuidadosos para extraer la miel. Clyde había tomado un frasco de la cocina y Token sabía cómo conseguir miel sin que las abejas lo picaran.
Para su suerte encontraron un pañal pronto. Token con cuidado se acercó. Metió una rama en el agujero del pañal y sacó un poco de miel que colocó en el frasco. Las abejas ni se inmutaban.
—¿Son tranquilas?—
—No, pero piensan que no soy una amenaza— Habló Token.
Pero escucharon unas ramas romperse. Detrás de ellos estaba un oso, posiblemente el mismoq ue persiguió a Tweek y Clyde.
—Clyde, no te muevas— Advirtió Token.
Clyde estaba temblando de miedo. ¿Moriría ahí?
Token, en un rápido movimiento, tiró la rama con rastros de miel hacia el oso y agito el panal. De este comenzaron a salir abejas que se dirigieron hacia el animal. Token aprovechó ese momento para tomar el brazo de Clyde y salir corriendo.
Fin flashback
—Y el resto lo sabes— Terminó Token
—Ese oso está rondando mucho p-por aquí— dijo Jimmy.
—Pues habrá que tener cuidado. Aquí tienes Tweek— Token extendió el frasco con miel hacia el rubio.
—Bueno, el desayuno está servido— mencionó Tweek.
—¡Desayuno!— gritó Clyde, olvidando que hace unos minutos estaba escapando de un oso y abejas.