Capítulo 14

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A medida que el embarazo de Yuwon avanzaba al octavo mes, los preparativos para la llegada de la pequeña Danyi estaban en pleno apogeo. La habitación del bebé estaba decorada con colores suaves y detalles adorables que Yuwon había elegido cuidadosamente con la ayuda de Jeongin y Changbin.

Jeongin, quien siempre había sido una figura materna cariñosa para sus hijos, se emocionaba cada vez que pensaba en su futura nieta. Yuwon se refería a él como "mami", y él hacía todo lo posible por asegurarse de que ella se sintiera apoyada y amada durante este proceso. Changbin, a quien Yuwon llamaba "papi", también estaba más involucrado que nunca, ayudando a Yuwon a prepararse y asegurándose de que no le faltara nada.

Una tarde, mientras Jeongin preparaba una merienda en la cocina, Yuwon entró con una sonrisa tímida. "Mami, he estado pensando... Quiero escribir una carta para Danyi, para que la lea cuando sea mayor."

Jeongin se emocionó al escuchar esto. "Eso suena maravilloso, Yuwon. Será un regalo precioso para ella."

Se sentaron juntos en la mesa de la cocina, y Yuwon comenzó a escribir, mientras Jeongin le ofrecía palabras de aliento y apoyo. Mientras escribía, Yuwon expresó sus esperanzas, sueños y amor por su futura hija, prometiéndole que siempre estaría a su lado y que haría todo lo posible por ser una buena madre.

Changbin llegó a casa poco después y se unió a ellos en la cocina. "¿Qué están haciendo?" preguntó, viendo a Yuwon concentrada en su carta.

"Mami y yo estamos escribiendo una carta para Danyi," respondió Yuwon, mostrando su escrito.

Changbin sonrió y se acercó para leer lo que su hija había escrito. "Es hermoso, Yuwon. Estoy seguro de que Danyi lo apreciará mucho cuando sea mayor."

La familia pasó el resto de la tarde juntos, disfrutando de la compañía y preparándose mentalmente para la llegada de Danyi. Aunque había sido un camino difícil, estaban unidos y dispuestos a enfrentar cualquier desafío que se presentara.

Durante las noches, cuando Yuwon tenía antojos, Changbin se levantaba sin quejarse y salía a buscar lo que ella necesitaba. A veces, regresaba con sorpresas adicionales, como flores o pequeñas golosinas, para animarla. Jeongin, por su parte, se aseguraba de que Yuwon se sintiera querida y apoyada emocionalmente, recordándole constantemente lo fuerte y capaz que era.

Un día, mientras Changbin y Jeongin estaban en el salón revisando los últimos detalles del cuarto de Danyi, Yuwon se unió a ellos con una expresión seria. "Mami, papi, he estado pensando mucho... Sé que fue difícil al principio, pero quiero agradecerles por todo su apoyo. No sé qué habría hecho sin ustedes."

Jeongin la abrazó con fuerza. "Siempre estaremos aquí para ti, Yuwon. Eres nuestra hija y te amamos."

Changbin asintió, emocionado. "Eres muy valiente, Yuwon. Estamos muy orgullosos de ti y sabemos que serás una madre increíble para Danyi."

A medida que se acercaba la fecha del parto, la familia se preparaba con anticipación y amor. Estaban listos para recibir a la pequeña Danyi y comenzar una nueva etapa en sus vidas, unidos y más fuertes que nunca.

Las últimas semanas del embarazo de Yuwon fueron una mezcla de emoción y tensión. Misul, conmovido por la situación y deseando estar cerca de Yuwon y su futura hija, decidió quedarse en su casa para ofrecer apoyo. Jeongin, siempre comprensivo y cariñoso, hizo arreglos para que ambos tuvieran una habitación cómoda y acogedora.

Aunque la relación entre Changbin y Misul se había deteriorado, ambos sabían que debían poner sus diferencias a un lado por el bienestar de Yuwon y la bebé. Changbin apenas hablaba con Misul, manteniendo una distancia fría pero respetuosa. Sin embargo, era evidente que, a pesar de todo, Changbin estaba dispuesto a aceptar la presencia de Misul por el bien de su familia.

Una noche, mientras Jeongin preparaba la cena, escuchó risas provenientes del cuarto de Yuwon. Se asomó por la puerta y vio a Yuwon y Misul juntos en la cama, hablando y riendo como si fueran una pareja. Aunque no eran oficialmente novios, la cercanía y el cariño que mostraban el uno hacia el otro era innegable.

Jeongin sonrió al ver la escena y volvió a la cocina, contento de ver a su hija feliz a pesar de las circunstancias. Poco después, Changbin llegó a casa del trabajo y fue a la cocina para hablar con Jeongin.

"¿Cómo está Yuwon?" preguntó Changbin, con una mezcla de preocupación y cansancio en su voz.

"Está bien," respondió Jeongin suavemente. "Misul está con ella, y parece que se llevan bien."

Changbin asintió, aunque no podía ocultar del todo su descontento. "Espero que Misul sepa lo que está haciendo. No quiero que Yuwon sufra más."

Jeongin se acercó a Changbin y le tomó la mano. "Sé que es difícil, pero tenemos que confiar en Yuwon. Ella es fuerte, y Misul parece estar realmente comprometido en ayudar."

Changbin suspiró y miró a Jeongin a los ojos. "Haré lo que sea necesario por nuestra hija y nuestra nieta. Solo espero que Misul esté a la altura."

En las siguientes semanas, Misul demostró su compromiso al cuidar de Yuwon. La acompañaba a todas sus citas médicas, le compraba antojos y la ayudaba a prepararse para la llegada de Danyi. A pesar de la tensión con Changbin, Misul no dejó que eso interfiriera en su deseo de estar presente y apoyar a Yuwon.

Una tarde, mientras Misul y Yuwon paseaban por el jardín, Yuwon se detuvo y miró a Misul con seriedad. "Sé que esto no es fácil, Misul. No sé qué va a pasar entre nosotros, pero quiero que sepas que agradezco todo lo que estás haciendo."

Misul sonrió y tomó la mano de Yuwon. "Estoy aquí por ti y por nuestra hija, Yuwon. No importa lo que pase, siempre estaré a tu lado."

Yuwon asintió, sintiendo una oleada de alivio y gratitud. Aunque el futuro era incierto, en ese momento se sentía segura y apoyada.

Finalmente, llegó el día del parto. Jeongin y Changbin se apresuraron a llevar a Yuwon al hospital, con Misul a su lado, sosteniéndole la mano y tranquilizándola. La tensión y la emoción llenaban el aire mientras esperaban la llegada de la pequeña Danyi.

Después de horas de trabajo de parto, Yuwon dio a luz a una hermosa niña. Danyi llegó al mundo rodeada de amor y apoyo, con su familia unida y lista para enfrentar cualquier desafío que viniera.

Jeongin y Changbin, con lágrimas en los ojos, sostuvieron a su nieta por primera vez. Misul, aunque nervioso, se sintió abrumado por el amor y la responsabilidad que ahora tenía hacia su hija. Yuwon, exhausta pero feliz, miró a Danyi con adoración, sintiendo que todo el sacrificio y el esfuerzo habían valido la pena.

A pesar de las dificultades y los desafíos que enfrentaron, la familia se unió más que nunca, decidida a ofrecerle a Danyi un futuro lleno de amor y posibilidades.

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