Lee Taeyong, un omega dominante de 25 años de edad, quién tiene una relación desde hace cuatro años con su alfa destinado, Jeong Jaehyun.
Su relación era por más, una de las más envidiadas por muchos, ya que además de estar unidos por el laso, todo...
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Día 8.
12:11 A. M.
Taeyong, estaba frente a su alfa, quién sentado en el sofá, miraba cómo el menor se quitaba toda la ropa, dejando ver su desnudez, su hermosa piel, tan suave y delicada.
Jaehyun lo tomó de la cintura, ayudando a sentarse nuevamente en sus piernas, ambos sintiendo sus pieles desnudas, la entrada del omega mojada por el lubricante natural, y el pene del alfa rozando con esta constantemente.
Las grandes manos del rubio acariciaban el trasero del contrario, las feromonas formaban una mezcla de aromas, los chasquidos obscenos por los besos, los movimientos de caderas de ambos en busca de más contacto, sus lobos sabiendo lo que se aproximaba, y la luna llena en todo su resplandor esa noche.
Taeyong se removió inquieto al sentir el dedo del alfa adentrarse en su interior, un jadeo salió de sus labios, se sentía impaciente y frustrado, quería más, necesitaba más.
-J-jae~.
Jeong metió el segundo dedo simulando embestidas, sabía perfectamente que su prometido quería más, que se sentía al borde, pero en esos momentos quería disfrutar un poco más.
-Más... p-por favor~
Él mayor miró a su esposo con una sonrisa, después de mucho tiempo, al parecer lo dejaría tomar el control.
Ver a su omega tan sumiso y sentir su cuerpo temblar ante cada toque, hacía que su lobo elevara su ego, aunque nunca lo admitiría en voz alta.
Él cuerpo del pelinegro fué depositado en el sofá con Jaehyun admirando cada detalle de este, tan hermoso y perfecto, tan suyo.
-Abre las piernas.
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Taeyong juraba que en todas las veces que había tenido sexo con su alfa, nunca lo había oído maldecir ó seguir sus instintos, cómo lo hacía ahora.
Él mayor lo embestia con brusquedad y profundidad, sentía cómo se hacía cada vez más grande y se abría paso en su interior de una manera agresiva.
