TORRES ENEMIGAS || WINNYSATANG

9

Por la mañana los primeros rayos del sol comenzaron a filtrarse por la ventana, bañando la habitacion en una luz dorada.

Winny observó a Satang quien dormía plácidamente a su lado, se levantó de la cama y tomo una ducha, dejaría que Satang durmiera todo lo que quisieses, era lo menos que podía hacer por el después de lo de anoche.

Winny entro a la ducha, sentía como el agua caliente caía sobre su piel, regalándole un momento de calma, cerró los ojos, sintiendo deslizar el agua por todo su cuerpo.

Se dejó envolver por la sensación de calidez, cada gota caía como una pequeña liberación, llevándose consigo los fantasmas de su vida en la mafia y las expectativas que su padre había puesto sobre él.

Mientras el vapor llenaba el baño, su mente se aventuraba hacia lo que había sucedido la noche anterior. Nunca había imaginado que Satang, alguien a quien había visto solo como un rehén, pudiera despertar en él esa sensación de querer tenerlo y tocarlo.

Una vez que terminó su ducha, salió, la humedad adhería las toallas a su piel y su cabello goteaba, mientras caminaba hacia el vestidor. Decidió vestirse con algo cómodo pero presentable, un simple conjunto negro que acentuaba su figura, dándole un aire de autoridad natural.

Al salir del baño, vio que Satang todavía dormía, su rostro tranquilo iluminado por la luz de la mañana. Winny sintió un tirón en su corazón al observarlo; había una vulnerabilidad en Satang que lo hacía ver aún más atractivo.

Winny, aún perdido en sus pensamientos sobre Satang, bajó las escaleras y se dirigió a la cocina. El aroma del té recién hecho y el sonido de los utensilios lo hicieron sentir cómodamente en casa. Sin embargo, cuando estaba a punto de servirse una taza, una de las criadas lo interrumpió.

-Señor Thanawin, lo busca el joven Gemini -anunció, con una mezcla de formalidad en su voz.

Winny asintió, visualizando a su amigo. Gemini siempre había sido su oído interno, alguien en quien podía confiar para tener una perspectiva diferente. Sin embargo, había algo en su voz que lo hizo sentir un pequeño nudo en el estómago. ¿Qué podría querer Gemini tan temprano en la mañana?

Al instante, su mente se fue de nuevo a la noche anterior. La intimidad que había compartido con Satang era algo que nunca había experimentado con nadie más, y eso lo atormentaba. ¿Qué significa eso para él como jefe de la mafia? ¿Podía permitirse ese tipo de debilidad?

Cuando Gemini apareció en la cocina, Winny notó el brillo de curiosidad en sus ojos.

-¡Hey! -saludó Gemini, sonriendo-. Te noto diferente, hermano. Pareces... más relajado. ¿Qué ha pasado?

Winny se quedó en silencio por un momento, considerando cómo responder. La noche anterior había sido una mezcla de placer y adrenalina que aún se amontonaba en su mente como un rompecabezas desordenado.

-No tengo nada de diferente -respondió finalmente, tratando de mantener la calma en su voz, aunque su interior estaba lleno de frustraciones-. Solo mi trabajo como jefe ya sabes.

Gemini frunció el ceño. Era perceptivo, y Winny sabía que no podría eludir su curiosidad. Decidió abrirse un poco más.

-La verdad es que anoche... pasé la noche con Satang -confesó Winny, su voz intentando sonar casual, aunque temía el impacto de sus palabras-. La situación se tornó... complicada.

Los ojos de Gemini se abrieron con sorpresa, y una sonrisa traviesa apareció en su rostro.

-¿De verdad? No me digas que lo has dejado salir de la 'cárcel', en la que lo tenias.-dijo, inclinándose hacia adelante con interés genuino.

-Lo hice, pero-Winny tomó un respiro profundo-. Es complicado. No debería haberlo hecho. Estoy rompiendo las reglas, y no puedo permitirme eso. Soy el jefe de una mafia, no puedo involucrarme sexualmente con mi rehén. Eso no solo significa cruzar una línea, sino que también le puedo dar un mensaje erróneo.

-Entiendo que es una situación delicada, pero... ¿acaso no se siente diferente? -preguntó Gemini, su tono ahora más reflexivo-. Nunca te he visto así.

Winny se rascó la cabeza, frustrado. -Es exactamente eso. Me siento diferente. Y es aterrador porque si mi padre se entera será un caos, no puedo involucrarme así con él. Hay límites, y para la mafia, esas cosas jamás deben cruzarse.

Gemini levantó una ceja, su expresión se tornó más seria. - mira se que la vida en la mafia es difícil y las reglas son frías, pero tú eres humano. No puedes negar que disfrutaste pasar la noche con él.

Winny sintió un nudo en el estómago-. Gemini, no se trata de si lo disfrute o no. la sociedad de la mafia prohíbe este tipo de relaciones entre miembros de la familia y rehenes. Con todos mis enemigos acechando, el riesgo es enorme. Si alguien se entera de lo que hice, podría poner en peligro no solo a Satang, sino también a la familia.

El rostro de Gemini se oscureció por un instante. -Es verdad; en este mundo, los sentimientos son un lujo que pocos pueden permitirse.

La vida que llevaban era un juego mortal, equivocarse podría significar perderlo todo y no quiere decepcionar a su padre.

Winny dirigió la mirada hacia el suelo, sintiendo un torbellino de emociones dentro de él. Era tentador dejarse llevar por el deseo que había sentido hacia Satang, pero el peso de su responsabilidad lo mantenía enraizado. La mafia no perdonaba debilidades y él era el jefe. La presión era asfixiante.

-La última vez que sucedió algo así dentro de la mafia... ya sabes cómo acabó -murmuró Winny, recordando el motivo por el cual murió su madre y el caos que había generado en su vida. Su padre había estado furioso, y las repercusiones habían llevado a una serie de eventos que casi destruyen su familia.

Gemini abrió los labios como si fuera a replicar, pero se quedó en silencio, captando la emoción que emanaba de su amigo. Después de un momento, dijo. - bueno, ya tuviste sexo con el, así que no es algo que puedas cambiar, habla con el y aclara las coas.

Winny se frotó la frente con cansancio-. Esto pondría en riesgo mi posición como jefe y él podría terminar siendo un peón en este juego que no es suyo.

El conflicto interno de Winny era abrumador. Por un lado, sentía un ardor que lo empujaba hacia Satang, una conexión visceral que no podía ignorar. Por otro lado, la razón le gritaba que ese camino estaba lleno de espinas y que lo conduciría a una traición a su propia naturaleza.

-No me gustaría que ni Satang ni yo fuéramos una estadística más en este mundo de locura -dijo, su voz temblando un poco. - no quiero decepcionar más a mi padre, yo... Creo que me equivoque desde un principio dejándolo salir del cuarto de rehenes.

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Holaa, aquí les dejo un cap. con mucho amorch, espero lo disfruten, estoy haciendo lo que puedo jaja, hay tanto en mi cabeza que al final termino agregando más en los capítulos que previamente ya estaban listos de publicar, solo espero que les vaya gustando la historia por que mi cabeza es un lío con la creatividad, tengo tanta que al final agrego más y más jaja, nos leemos en el siguiente capítulo, bye!