Capítulo 21

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— Todos, por favor guarden la calma. Los plomeros ya están encargándose del problema— decía Gwen a sus invitados tratando de calmarlos.

El patio del salón era enorme y justo daba una vista perfecta para permitir a todos ver como la enorme nave caía. Todos recordaban el problema de la invasión, y, aunque nadie noto el origen de la nave, algunos alcanzaron a escuchar el comunicado del abuelo Max.

La familia de Natalie, la madre de Gwen se agitaron mucho, al igual que casi todos los invitado humanos que no tenían relación cercana con los asuntos de plomeros. Varios de los invitados de otros planetas que no eran plomeros comenzaron a irse fuera mediante teleport o naves qué dejaron en el estacionamiento (naves unipersonales claro).

En la mesa Tennyson había más calma, Carl y Sandra estaban cuidando de Sam, el pequeño necrofrigian que jugaba con una esfera de energía hecha por su bisabuela. Junto a ellos Camila veía por sus hijos, Joel y Betty Jean jr.

Hex y Charmcaster estaban muy tranquilos tomando una bebida, mientras la pareja del mago mostraba algo de molestia ante la aparente imposibilidad de su familia. Aunque, si ocurría algo ellos planeaban abrir la puerta a Legerdomain y escapar.

Azmuth y sus asistentes se había ido desde que termino de hablar con Paradox. Algo que no ayudaba mucho a Gwen para calmar a sus invitados que comprendían lo que ocurría y menos a los que no.

Tomó un rato, pero, por fin tras estar hablando logró conseguir que los presentes se calmaran.

— Los plomeros ya están actuando, no hay de que preocuparse. No hay más naves en el espacio, debió ocurrir algún accidente, pero, por el tamaño de la nave se debe movilizar suficiente personal. Es solo algo protocolario— ella sonaba relativamente convincente.

Sus padres estaban tratando de ayudar a calmar a su familia. Kevin hacía lo que podía para ayudarla, pero, su verdadero fuerte estaba allá, en el campo donde sus habilidades podían ser útiles.

— Kevin, esto es un verdadero problema. Espero que no ocurra lo mismo que la otra vez— le comento Gwen a su pareja.

— Tranquila, esta vez no nos tomarán desprevenidos. Una cosa es que una nave aparezca de la nada, pero, ocultar una flota como la de la última vez no será posible— afirmó Kevin.

No obstante, la pequeña flota de Looma había pasado casi inadvertida.

Por su parte Gwen estaba teniendo una serie de emociones distintas. La fiesta se estaba llendo al retrete, la planificación y todo el trabajo duro se esfumaron por culpa de algo demasiado impredecible, quería gritar del enojo pues ella quería conseguir hacer una reunión casual con humanos y alíen, pero, eso estaba fuera de discusión ahora.

Por su parte Kevin estaba enojado pues sus propios planes se estaban viendo enterrados por la situación. No podría pedirle matrimonio a Gwen en esa situación, sería demasiado tonto, aún para él.

— Espero que Joe este bien— dijo Camila viendo hacia arriba.

— Descuida querida, es un gran plomero ¿cierto? Además, toda la familia fue con él, no le ocurrirá nada— dijo Carl tratando de sonar calmado

Los niños de Camila comenzaban a verse algo afectados por el pánico general.

— Eso es cierto, además, Ben fue también con ellos. Es un super héroe, todos estarán bien— agregó Sandra.

Los niños comenzaron a sonreír felices, admiraban a Ben, también a su tía Lucy. Si, si el héroe Ben 10 estaba ahí, todo iba a estar bien. Comenzaron a sonreír y platicar sobre los aliens del héroe, en cual de podría transformar y comenzaron a cambiar de forma mientras hablaban.

Tradiciones y promesas (Ben x Looma)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora