Ya no quiero estar aquí

Me canse de vivir

La puerta cayó al suelo de una patada, lo que provoco que hiciera un eco por toda la habitación . Todos volteamos al ver a James parado mirando a Laiza sorprendido, sus ojos se llenaban de lágrimas mientras más tiempo pasaba viendola.

—Joder, esto…esto… —tartamudeo nervioso.

—Hola gusano —le sonrió Laiza.

Él doctor supo lo que James estaba a punto de hacer , así que se adelanto a hablarle.

—Joven Wolff, se encuentra delicada, no la…

James ignoro las advertencias del doctor y corrió hacia Laiza , para abarazarla mientras enterraba su rostro entre su hombro. Sollozo más fuerte.

—Oye no me abra…

—Te he extrañado tanto. No vuelvas a alejarte de mi lado, otra vez —le pidió entre lágrimas—. Te lo suplico.

—No me abrazes —fue lo que le dijo, Laiza.

—No quiero, no puedo —le dejo en claro, mientras la abrazaba más fuerte sollozando—. Ha sido tan dificil seguir sin ti estos dias.

—No me abrazes —volvió a insistir pero esta vez agrego:—, no me abrazes, por favor. Estoy sucia.

—No me dejes. No te vayas. Te lo suplico, quedate conmigo.

La fortaleza que James siempre demostraba ante todos, se había derrumbado. Se veía tan vulnerable y frágil. Esta era la segunda vez , que veía llorar a mi hermano. La primera fue cuando , mamá nos contó que había pasado con papá, después de que yo siempre le preguntara: ¿dónde esta papá? En ese entonces, eramos unos niños , después de eso, nunca había visto llorar tanto a mi hermano.

—Quiero que nadie me toque —Esta vez, el tono de su voz era dura y decidida.

—Lo mejor sera que todos se retiren. Tengo que hacerle algunos exame…

—¡¿Qué parte de no quiero, que nadie me toque , no entendieron?! ¡Fuera todos!

James se limpio las lágrimas y le sonrió.

—Si quieres que me vaya, lo haré , pero volveré mañana para verte.

Todos salieron de la habitación, dejandome sola con Laiza. Yo seguía en shock, no sabía que decir o que hacer al respecto. Quería abrazarla, pero no podía.

Ella no quería volver a ser tocada por nadie.

—Wow mi cabello a crecido mucho estos meses —menciono sorprendida mirando los mechones de su cabello—. No estoy acostumbrada a llevar el cabello largo, me gusta más corto.

—Si deseas, podemos ir a la peluqueria.

Laiza forzó una sonrisa.

—Lo sien… —intente disculparme.

—No es tu culpa —se apresuro a decirme—. Nadie tiene la culpa de lo que me paso.

—De alguna manera fue mi culpa, no pude cuidarte. No me di cuenta que no estabas bien, no vi las señales, solo me enfoque en lo que veía, y no, en lo que sentías.

—Amiel —me dice—, tú eres mi amiga. La que debía cuidarme era mi madre. Ella se olvidó, me descuido y me violaron. Ya no le des más vueltas al asunto, el daño ya esta hecho, ya me lastimaron. Ahora lo que tengo que hacer es esconderme de mi padras…

—No puedes —la interrumpi—. Él, ya no puede hacerte nada. Tuvo una hemorragia interna y murio.

Laiza no mostro sorpresa, ni felicidad. Tenía la mirada perdida. Y al igual que a todos. Me pidió que me vaya. Salí de la habitación pero no me fuí de su vida. James se quedo haciendo guardia afuera con la escusa de Laiza lo podía necesitar. Yo tuve que regresar al apartamento, a ver a Ashtor—me aterraba sus recaídas—. Para mi suerte, lo encontre sentado en el sofá , durmiendo con Kay sobre sus muslos también durmiendo. Lo despertr con un beso en la frente. Cenamos y le conté todo. Él me dijo que no me preocupara por él, y que me tomara todo el tiempo que necesitara para estar con mi amiga y ayudarla en su recuperación. Al día siguiente regrese al hospital a ver a Laiza y a escuchar el analisis del doctor.