Escribiste canciones de cuna
mientras esperabas a la inspiración.
Yo miraba la luna
y a ti te quemaba el sol.De tus labios salieron cascadas de rabia y desesperación,
y con mis manos manchadas yo quise absorber tu dolor.
Me dijiste: "déjame tranquilo, eres de lo peor",
pero te agarré de los hombros y mirándote te di un beso de redención.Tú dejaste que el fuego me quemara,
fuiste muy débil al dejarme ir
y ahora yo me prendo en llamas
mientras ellos me crucifican a mí.Ahora sé cómo actúa el karma,
tanto que en mis sueños no me deja dormir.
Quisiera poder golpear tu cara,
pero sigo llorando por ti.No eras el amor de mi vida,
pero pude intentarlo hasta el fin.
Me enteré de que sigues enredado en las espinas,
quiero que ahora se claven en mí.Escribiste sobre hojas de marihuana,
el olor me llegó hasta aquí.
En mis sueños estás acostado en mi almohada.
Te odio por dejarme así.De tus labios salieron cascadas de penitencia y perdón
y con mis manos ensangrentadas tomé tu cara, buscando una salvación.