Capitulo 24

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Capítulo 24: La noche de bodas

Suleimán y Sansa se retiraron a sus aposentos después del banquete, rodeados de la luz de las velas y el sonido suave de la música. La habitación estaba decorada con flores y sedas, y el aire estaba lleno del perfume de la mirra y el incienso.

Sansa se sentía nerviosa y emocionada al mismo tiempo. Era su noche de bodas, y sabía que Suleimán era un hombre experimentado y apasionado. Se preguntaba qué pasaría cuando se acostaran juntos.

Suleimán se acercó a ella y la tomó de la mano. "Sansa, eres hermosa", dijo. "Me siento afortunado de tenerte como mi esposa".

Sansa sonrió y se acercó a él. "Y yo me siento afortunada de tenerte como mi esposo", respondió.

Suleimán la besó suavemente en los labios, y luego la llevó a la cama. Se acostaron juntos, y Suleimán comenzó a besarla y acariciarla con suavidad. Sansa se sintió relajada y disfrutó del momento.

Mientras estaban juntos, Suleimán no podía evitar pensar en Hurrem. Se preguntaba qué hubiera pensado su amada si estuviera allí, viendo a Suleimán con otra mujer. Pero Sansa era diferente, era joven y hermosa, y Suleimán se sentía atraído por ella.

Después de un rato, Suleimán se detuvo y miró a Sansa a los ojos. "¿Estás segura de que esto es lo que quieres?", preguntó.

Sansa asintió. "Sí, estoy segura", respondió. "Te quiero, Suleimán".

Suleimán sonrió y la besó de nuevo. "Y yo te quiero, Sansa", dijo. "Vamos a pasar una noche inolvidable".

Y así, Suleimán y Sansa pasaron la noche juntos, disfrutando del amor y la pasión. A pesar de que Suleimán todavía pensaba en Hurrem, se sentía feliz de estar con Sansa.

El Sultan de Dorne Que Se Convirtió En El Sultan Del Mundo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora