Blood Moon MewGulf

Resolución

Mew se desplomó frente a mí, con una flecha cruzada que sobresalía de su pecho. Se sentía como si me golpeara.

-¡Mew!-

-¡Ay. Eso tiene que doler.- dijo Smith

-Tú, pedazo de mie...-

Smith me levantó de un tirón con una fuerza sorprendente, agarrando mis bíceps con un agarre de hierro.

-¿Por qué, Gulf? ¿Por qué él? Podrías haberme tenido. ¡Habría hecho cualquier cosa por mí! Pero en cambio, te dejaste seducir por este monstruo. Y ahora mírate a mí, una bestia miserable como las demás.- Smith levantó su ballesta...- Si te sirve de consuelo, lo siento mucho...-

-Smith... Piénsalo bien. Si me matas, es un asesinato a sangre fría.-

-Matar a un perro rabioso no es un asesinato, es un servicio público.-

-Pero... todavía tengo debilidad por mí. Los demás dicen que tengo un corazón demasiado blando.-

-En lugar de menospreciarte, te mantendré como mascota. Aunque con una grave herida que estarás cojeando por el resto de tu vida.-

Me empujó hacia abajo, balanceó la ballesta y me apuntó a la pierna... ¡PING! La flecha golpeó inofensivamente saltando a la pared de metal del pórtico. El Colmillo del Alfa, que aún colgaba de mi cuello después de la transformación, retumbó con calidez.

-¿Eso es todo lo que tienes?-

-¡¿Qué diablos?! -

Furioso y desconcertado, Smith recargó la ballesta y volvió a apuntar. A estas alturas ya me había puesto de pie y un poco de miedo se filtró en la expresión de Smith.

-Smith... ¡Vete al diablo! ¡Hijo de puta mentiroso!-

-Eso es lo que me encanta de mí, Gulf. Siempre caes peleando. Ahora respira hondo. Esto puede doler un poco.-

Cuando su dedo comenzó a apretar el gatillo, cerré los ojos, anticipando el dolor, cuando... ¡BOOM! La ventana detrás de él explotó en una lluvia de vidrio cuando otro hombre lobo salta al rellano.

-¡Awoooo!-

-Qué...-

¡Un coro de aullidos se mezcló con el de Charlotte, mientras la manada victoriosa subía las escaleras, con furia en sus ojos brillantes!

-¡Aléjate Gulf!- gritó Davikah

-¡Ese es nuestro chico!­- bramó Bright

-Te vamos a destrozar...- dijo Lily lamiendo sus colmillos

-¡Miembro por miembro!- siguió Dew

Los lobos rondaron en círculos y Smith dejó escapar un patético balido de miedo, olvidando toda bravuconería. Con un rugido feroz, Charlotte arremetió y clavó sus garras en el cuerpo de Smith. La sangre brotó de su pecho y cayó de rodillas...

-¡Ughhh!- Smith

-¡Grrrrr!-

-Charlotte... él es mi presa. Sujétalo.-

Mientras Charlotte plantaba sus enormes patas en el pecho de Smith, agarré una flecha de su ballesta, lo levanté con ambas manos y... vacilé.

-Gulf, lo siento. No, por favor...­-

-....-

-Gulf, me envenenó. Le disparó a Mew. Si lo dejas ir, ¿crees honestamente que alguna vez dejará de intentar matarnos?-

-¡Podríamos tener una vida juntos! Una vez que Suppasit esté muerto, recuperarás mis sentidos... verás lo que yo veo...-

-No. Digas. Su. Nombre.-