Era en la tarde cuando James yo yo estábamos tumbados en la cama teniendo una siesta, abrazados, mi cabeza reposada en su pecho y su mano en mi cabello.
A lo lejos sentimos unas voces, rápidamente James se despierta al igual que yo, nos comenzamos a vestir y disimulamos, voy directamente a la cocina y él al baño, mis tíos estaban entrando por la puerta, venían contentos como siempre, preguntando cómo la habíamos pasado, a lo que le respondí—Genial- James sale del baño y saluda a mi tía diciéndole que iba a correr un rato, me sentí un poco mal porque ni siquiera hizo contacto visual conmigo, sale de la casa y se va mientras le dice algo a mi tío.
Me encierro en la habitación y comienzo a pensar, todo lo que había pasado en tan solo poco días dejaban en mi una ligera taquicardia, él me gustaba demasiado, mis objetivos estaban más que claros, pero no sabía que sentía él.
Salgo a dar una vuelta y me dirijo al río, me quito la ropa y de una me lanzo al agua, estaba flotando con los ojos cerrados, cuando siento algo que se va acercando a mi de manera sigilosa, no me asusté, era él, lo sabía por su olor, siento una sombra alrededor de mi cara y unos labios besando los míos, unas manos tomándome todo el cuerpo y un apretón que para mi significó
—No te vallas nunca—
Abro mis ojos, James me miraba, sus ojos estaban llorosos y su cara reflejaba algún tipo de sentimiento, mi mano acaricia su hermoso rostro y una ligera lágrima recorre mis dedos.
Me asusto un poco y le pregunto que sentía al respecto, quería saber porque estaba llorando,
-Es todo una locura, no sé que me ha pasado, desde el momento que te vi algo en mi despertó de tal manera que siento un cosquilleo al verte, eso me aterra, nuca había estado así con un chico- dice James
Le sonrío y trato de calmarlo un poco, le contaba que yo también sentía una fuerte atracción por él, me estaba gustando demasiado, pero que él tenía novia y no quería ponerlo en una situación incómoda. Él me comenta que me mintió, no tenía novia, lo hizo para auto convencerse de que tenía a alguien y por ese simple hecho tomaría un poco de distancia conmigo, pero no se contuvo.
Sentí un alivio al saberlo, y se me escapó un beso acompañado de una risa tonta, él me lo devuelve y me pregunta cuando me iría, ahí recordé que esta historia no podía ser eterna, tenía que volver a casa y él a la suya,
—Seguramente mañana me debo ir—le respondo cabizbajo.
El baja su mirada y comienza a besarme desesperado, baja su mano y se quita la ropa, yo estaba desnudo ya, fue directo al grano, alzó mis piernas apretándola fuerte y me penetró, entraba delicioso, era una sensación especial, ahí en el río, follando como unos salvajes, cada vez me apretaba más, sus manos cubrían todas mi espalda haciendo presión hacia él, su pene entraba y salía a la perfección, su respiración en mi cuello y sus ligeros gemidos, yo estaba bien a gusto, me toma de la mano y corremos a la orilla, me toma del cabello mientras me arrodillo, todo su pene estaba en mi rostro, sentía unas ligeras cachetadas mientras el se masturbaba de forma brutal, su puño se cerraba cada vez más y su polla se hinchaba, hasta que estalló en mi cara, era demasiado, el morbo que sentía me provocó una calentura horrible, terminé corriéndome solo, sin tocarme, su pene dejaba caer unas gotitas de esperma y mi lengua las retiró haciendo una buena mamada, él me levanta del suelo, me come la boca nuevamente y me da una fuerte nalgada.
Después de bañarnos un rato en el río, decidimos ir a la casa, el sol se había guardado, mientras cenábamos, siento su pie tocándome, al mirarlo, veo una sonrisa de cariño, que me hizo enrojecer, mis tía se dió cuenta y comenzó a reír,
-Hacen muy bonita pareja— dice mi tía mientras come de su comida—James y yo nos atragantamos de la risa.
Mi tío totalmente despistado pregunta si éramos gay,
— No, tranquilo, no pasa nada solo pregunto para saber, es tu vida y si eres feliz así cuenta conmigo— dice mi tío mientras mira a mi tía tomándole la mano—
No buscaba nada, pero desde que lo vi sentí esa sensación de querer tenerlo conmigo, me atrapó su manera de ser y su risa tímida— dijo Jame en la mesa.
Yo estaba encantado, ya mi familia sabía, y nosotros éramos dos chicos con fuertes sentimientos.
Después de un buen rato mis tíos se van a la cama y nosotros a nuestra habitación, yo sin pensarlo me acuesto en la cama de James, mientras él me pasaba la mano por el hombro, ahí estaba, la luna, tan Grande y tan iluminada, el estira su mano y señala una estrella, resaltaba todo el cielo con su esplendor,
—Te regalo esa estrella-dice James mientras voltea su cabeza hacia la mía.
Me emocioné tanto que lloré de la alegría, comenzamos a reír y a planificar futuros encuentros, me subí encima de él, le miro a los ojos y le digo—Yo te regalaría una vida— sus ojos brillan y siento su mano por debajo de mi camisa acariciando mi espalda, poco a poco le iba dando pequeños rasguños, siento un erección de su parte.
Comienzo a moverme encima de él, masajeando mis nalgas con su paquete, sus venas las palpaba por encima de calzón, intensificaba el movimiento y eso lo volvía loco, comencé a bajar por su pecho pasándole toda mi lengua, mordí delicadamente sus tetillas, baje hasta sus oblicuos y olí su pene por fuera del calzón, estaba todo húmedo por su líquido pos seminales, saco su polla por un costado del calzón y comienzo chupar lentamente de arriba hacia abajo, no me cabía completa en la boca, mi lengua bordeaba su glande una vez más.
El apretaba bruscamente mi cabello y me penetraba la boca, estaba completamente lubricado su pene, me levanto, lo veía desde arriba, su cuerpo estaba entre mis piernas, me voy sentando poco a poco tomando su polla y colocándola para penetrarla, me senté en ella, solo me follaba su puntita, eso hacía que el gimiera, le provocaba unas cosquillas y a mi un placer enorme, estaba más que dilatado y termine de sentarme, la tenía toda dentro de mí, el no paraba de gemir, le tapaba la boca, y agudicé mi movimiento, era como si bailara con su miembro dentro, el me empuja hacia detrás, me voltea haciendo que me ponga en cuatro, me penetro tan fuerte que sus bolas chocaban con las mías, sus muslos y el sudor provocaban un sonido excitante, James se posiciona un poco y me pone el pie en la cara presionándolo fuertemente, eso me dió un morbo increíble, me estaba destrozando el ano, no sentía dolor alguno, se saca la verga y comienza a darme con ella.
Me volteo y me siento, mis pies los enlazo en su cintura y comencé a trotar, el me toma la polla y comienza a sobarla hasta que de repente nos corrimos a la vez, tenia el culo relleno, esa sensación es increíble y él tenía su pecho y parte de su mentón lleno de mi semen.
Nos levantamos y entramos al baño, nos dimos una ducha mientras cantábamos en voz baja, fue lindo ese momento, terminamos y nos fuimos a la cama, nos abrazamos como si el mundo se fuese a acabar y nos dormimos placenteramente.
Al día siguiente me tenía que marchar, él estaba rayado, no quería separarse de mi, créanme, yo tampoco, nos dimos un fuerte abrazo y un beso que jamás olvidaré, al voltearme escuché,
—Hasta pronto, te iré a buscar y te llevaré conmigo siempre, no te librarás de mí tan fácil.
Se ríe y me lanza un beso, mis tíos me esperaban en las afuera y salí a buscarlos, mi corazón se contraía y una lágrima caía en mi rostro, pero tenía la certeza de que no iba a hacer la última vez...
"Pronto tendremos otra parte"
