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La neta que la vida del Ronsito era bien surrealista,digo,no había otra cosa que explicará todas las chingaderas que le pasaban a tan corta edad. Lo gacho también era que no se podía librar de estas.
—Mamá,ya no quiero estudiar—el Ron decía entre susurros mientras caminaba hacia el castillo,que sin duda era precioso.
Claro,no cometería el error de adular el castillo,por algún motivo Harry Potter se puso celoso cuando dijo que era precioso...
Y hablando de Harry, esté le sostenía la mano mientras avanzaban, Ron ya se tenía que hacer la idea de que ni al baño lo dejaría ir solo...
—Me alegra tenerlos acá muchachos— una voz femenina pronto interrumpió el tren de pensamientos de Ron.Era McGonagall,la jefa de casa de Gryffindor.
— Esperó que se comporten,pronto serán sorteados a la que será su casa los próximos siete años— al parecer la anciana no parecía notar el ambiente todo incómodo que se cargaban los niños,lmao.
—Cualquier casa en la que quede,espero Potter no esté ahí...—la chica de rulos cafés le dijo a la rubia que en una vida pasada pudo ser su enemiga.
—Igual,no quiero estar con él...—.
— Les daré un tiempo para que se arreglen...—Mcgonagall dijo mientras centraba su atención en Neville para después moverse a Ron. Pronto extrañándose por la cercanía de Potter al niño.
Ron sintió como se le ponían rojos los cachetes por la atención,sin notar cuando Harry se ponía a limpiarlo,peinarlo y poner bien la corbata solo para al final darle un peso cerca de los labios.
No creo que sea necesario decir que todos se quedaron estáticos, incluido el propio Ron que parecía pescadito.
Cuando pensaba que Potter no lo podía sorprender más,llegaba y le daba un beso.
—Vamonos mi rey,ya quiero que nos den nuestra habitación—Sin más el Harry jalo a Ron dentro de el castillo,sin acatar a las órdenes de McGonagall.
—Ni conozco al pelirrojo y ya lo siento por el— Blaise dijo mientras Pansy a su lado asentía.
Todos los niños le avanzaron,dejando a McGonagall con muchas preguntas.
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