𝑨 𝒏𝒆𝒘 𝒃𝒆𝒈𝒊𝒏𝒏𝒊𝒏𝒈 (𝑹𝒊𝒗𝒂𝒓𝒊)

𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐 𝟏

La luz que entraba por la ventana despertó a la pequeña rubia que dormía plácidamente en su gran cama, hoy era el día.

La pequeña se levantó con gran entusiasmo y se dirigió a la cama de sus padres, que seguían dormidos.

—¡Mamá, papá! ¡Arriba! ¡Es hoy!. — saltaba una pequeña Abril en la cama de sus padres. —

—Hija...Son las 8 de la mañana... ¿No podías esperar un poco?. — dijo su padre, Abelardo, con un tono algo cansado. —

Abril negó con la cabeza y siguió saltando, estaba emocionada, hoy cumplía 7 años, y sus padres prometieron llevarla a patinar sobre hielo, pero no solo eso, también prometieron comprarle una perrita.

—¡Hay que levantarse ya! ¡Hay muchas cosas que hacer hoy!. —Abril se bajo de la cama mientras tatareaba una canción e iba a la sala. —

Sus padres se levantaron, no con mucho ánimo, bajaron con ella y vieron a su otra hija, de unos 11 años, ayudándola a hacer su propio desayuno, se veían tan lindas juntas.

Amairani y Abril eran muy buenas hermanas, a pesar de que se llevarán 4 años, tenían una muy buena amistad y se apoyaban mutuamente.

—¡Mira mamá! ¡Estamos haciendo el desayuno!. — Adriana sonrió al verla, tenía la cara manchada de harina y un delantal que le quedaba demasiado grande, ya que era suyo. —

—Muy bien hija... Por cierto, ¡felicidades!. —La madre de ambas chicas fue corriendo a abrazar a la menor, dándole un beso en la cabeza al final del abrazo—

—Muchas gracias mamá. —Abril dejó de ayudar a su hermana para ir corriendo con su padre y abrazarlo, al sentir los brazos de ju hija rodear sus piernas, este la levantó y beso su mejilla. —

—Felicidades mi niña. —Abelardo dejó a su hija en el suelo con una sonrisa en su rostro y se dirigió a hacerse un café. —

—¡Gracias papá!. —Dijo Abril sonriendo mientras se dirigía a la mesa para sentarse. —

Todos se sentaron a comer el desayuno, la que primero terminó fue Ama, que se fue a arreglar en seguida ya que ella también iria a patinar y a la tienes a de mascotas con su hermana, la segunda en terminar fue Adriana, que se puso a ordenar la cocina y luego fue a preparar la ropa de Abril y los dos últimos Abelardo y Abril, fueron a prepararse más tarde

Cuando Abril subió a su cuarto vió la ropa que su madre le había sacado, era un bonito peto rosa con una chaqueta y unas botas de ese mismo color, era hermoso.

Se puso la ropa felizmente y bajó a donde estaba su madre peinando a su hermana mayor, Ama llevaba unos pantalones negros con una camiseta blanca y una chaqueta también negra. Al verlas Ari se acercó.

—Mamá, yo también quiero que me hagas trenzas. —Sonrió Abril con un pequeño brillo en sus ojos. —

—Claro, cuando termine con tu hermana te peinado a ti. —Dijo Adriana mientras terminaba de peinar a Amairani. —

Cuando Ariana terminó de peinarlas a las dos y todos estuvieron preparados, se dirigieron a la pista de patinaje, era muy grande y había cuentos de personas en el, en el medio había un gran árbol de Navidad decorado con luces y adornos.

Se acercaron a la tienda de alquiler de patines y alquilaron cuatro pares, uno para cada uno, más tarde, entró toda la familia.

Había que decir que para estar en su pueblo esa lista era bastante grande, ocupaba toda la plaza del pueblo, pero por desgracia, esto no estaría para siempre, seguramente la quitarían a finales de Enero.