LOS JOHNSON

FANTASMAS DEL PASADO

Abro los ojos y veo una luz clara entrando por la ventana. Siento como si estuviera muerta en vida. Me duele el cuerpo entero y la cabeza me bombea. Me incorporo y veo que la cama de Arone está vacía. Me giro a la mesita para coger mi teléfono.

Tengo una barbaridad de mensajes, desde gente cercana que tengo agregada hasta gente que no conozco de nada. Me levanto y noto el frío suelo, me estremezco. Camino hacia la puerta, la abro y veo a Arone en la isla de la cocina bebiendo un vaso de agua.

Tiene la piel más pálida que de costumbre y unas ojeras horribles.

-¿A qué hora te has despertado?- pregunto dejando mi móvil en la encimera y acercándome a él.

-No he podido dormir- dice en un murmuro.

Abro mucho los ojos.

-Deberías descansar, Arone- digo poniéndole una mano en la espalda.

Arone suspira y asiente.

Se mete en la habitación sin decir nada.

Y aquí estoy yo, sola como un pasmarote en la cocina de nuestro nuevo ''hogar''.

Suspiro y abro la nevera.

Hay varias, cosas pero yo me decanto por una manzana.

Mientras la lavo oigo que tocan el timbre.

Abro la puerta y veo a Luke, que tiene una caja de cartón bastante grande entre sus brazos.

-Hola, Elisabeth- saluda cordialmente.

-Hola, oficial- saludo.

-Llámame Luke. Al fin y al cabo me da a mí que vamos a pasar mucho tiempo juntos-. Dice un poco apenado.

Yo asiento. Al no decir nada ninguno de los dos, le abro un poco más la puerta para que pueda pasar.

-Os he traído un poco de ropa, espero que os vaya bien. Por cierto ¿dónde está Arone?- pregunta al no ver a mi hermano en el salón.

-Se acaba de acostar- digo encogiéndome de hombros.

-¡¿Ahora?!- pregunta Luke sorprendido.

Yo asiento. Luke suspira.

-Bueno... que descanse... supongo que me tengo que ir... ¿Puedes hacerme el favor de llamarme cuando Arone se levante? Tengo que hablar con él- dice dirigiéndose hacia la puerta.

-Claro- digo yendo a la puerta para poder despedirme.

Luke, ya de espaldas mirando a las puertas del ascensor se gira y me mira.

-Yo... quería preguntarte, ¿cómo estás?- pregunta dejando de lado el ascensor.

-Sinceramente no lo sé, todo está pasando tan, tan rápido...-

-Bueno, sé que solo soy un policía joven, pero si necesitas ayuda me la puedes pedir, ¿de acuerdo, Elisabeth?- Dice Luke poniéndome una mano en el hombro.

-Gracias, Luke-

El ruido de que el ascensor está aquí nos alarma.

Se gira y ve las puertas abriéndose.

-Adiós, Elisabeth-

-Adiós Luke- finalmente lo veo meterse en el ascensor con una pequeña sonrisa.

Cierro la puerta y me encamino a la caja de cartón que Luke ha dejado hace unos momentos en el suelo.

La abro y empiezo a separar la ropa de Arone y la mía.

Después de haber estado un rato haciendo eso cojo una sudadera negra lisa y unos tejanos anchos rotos.

Me meto al lavabo y me cambio.