Cortejando al amo Jeon ⊰KookMin⊱ ADAPTACIÓN

Capítulo 05

Las manos de Jimin temblaban mientras llevaba sus bolsas al ascensor. No tenía ningún mueble, así que en solo dos bolsas estaban todas sus pertenencias. Tenía algunos cuadros que su hermano prometió llevarle más tarde cuando terminara con Jin. Se alegraba de salir de la casa. Jimin no deseaba estar ahí y oír a su hermano teniendo sexo con alguien. Era la primera vez que Namjoon llevaba a alguien y por las calientes miradas que intercambiaban, eso iba a ser una larga noche. Él tendría también su propia larga noche.

Llegando al frente de la puerta de Jungkook se preguntó si debería de tocar. Se sentía estúpido dado que podía vivir ahí, pero sentía demasiado informal solo entrar. Seguía debatiéndolo cuando la puerta se abrió y Jungkook lo vio con una exasperada expresión.

—¿Te ibas a quedar parado ahí toda la noche?.

—Posiblemente.

Sin otra palabra, Jungkook tomó las bolsas de Jimin y entró al apartamento. No sabiendo qué hacer, Jimin lo siguió.

Jungkook llevó las bolsas a la habitación que Jimin sabía que era la extra y su corazón se cayó a sus pies.

Quizás él malentendió el propósito.

Quizás, Jungkook realmente no quería que estuvieran juntos como una pareja, quizás el hombre iba a entrenarlo como un sum y entonces lo dejaría libre. Esa no sería la primera vez, si los rumores eran correctos.

Con el corazón hundido, Jimin siguió al Dom que llevaba sus cosas.

—¿Este es mi cuarto?— preguntó, viendo a Jungkook dejar las bolsas al lado de una  pulcramente arreglada cama.

Jungkook sacudió la cabeza.

—Este será tu estudio de arte. Dejo tus cosas aquí para no tropezarnos con ellas a mitad de la noche. Desocupé la mitad de la cómoda y te dejé
lugar en el armario para lo que quieras colgar—Jimin se estremeció aliviado.

—Quiero decirte cuánto lo siento.
—¿Lo haces?— La hermosa cara de Jungkook tenía una expresión que Jimin no podía determinar.

—Sí.
—Desnúdate.

Viéndolo fijamente, le tomó un momento darse cuenta que su amante era serio.

—Um, está bien—Con manos temblorosas se quitó la ropa.

—Dóblalas y déjala en la cama—Jimin siguió las indicaciones obedientemente.

—Párate correctamente—Jungkook ladró en un duro tono.

Separando los pies al ancho de sus hombros, Jimin juntó sus manos detrás de su espalda. Se puso duro bajo el escrutinio de su amante, mientras Jungkook lo rodeaba igual que un gran felino a su presa.

—Escucharás y hablarás sólo cuando se te pregunte directamente. ¿Entiendes?.

—Sí, Señor— Jimin respondió en una suave voz. Estaba asustado de arruinar aún más las cosas. Quería estar con Jungkook y haría cualquier cosa para seguir con él.

—Me culpo de lo que sucedió en el club. Si tú estuvieras seguro de mi afecto por ti no hubieras pensado ni por un segundo que un viejo amigo era un actual amante. Si supieras cómo me siento, no habría dudas en tu mente, porque nadie y quiero decir nadie, nunca me ha impresionado como tú lo haces—Los ojos café de Jungkook taladraban su interior.

—He tenido muchos amantes, no puedo esconder eso, pero a ninguno he amado. Solo a ti. Siempre pensé que así era como yo era. Indiferente. Insensible. Pero ahora sé que era porque estaba esperando a la persona perfecta—El Dom acunó la cara de Jimin entre sus grandes manos.