.
.
.
Dentro de la mente de TN, el caos era absoluto. La sala de control estaba en llamas... figurativamente, por supuesto, aunque con Furia, uno nunca sabe.Temor: -corriendo en círculos, agitando las manos- ¡Código rojo! ¡Emergencia total! ¡Esto no es un simulacro, repito, NO es un simulacro! ¡Nos van a descubrir! ¡Estamos acabados!
Ansiedad: -sudando baldes y con las manos temblorosa- ¡Oh, no, oh, no! ¿Y si ella piensa que somos unos completos pervertidos? ¡Nos va a denunciar, nos van a echar del vecindario, y terminaremos viviendo bajo un puente!
Alegría: Vamos, chicos, calma! Fue solo un pequeño... malentendido. No hay necesidad de entrar en pánico, podemos arreglarlo. ¡A ver, pensemos positivo!
Desagrado: De verdad, Alegría? Porque si esto es lo que llamas un "pequeño malentendido'', entonces vivimos en un mundo lleno de "grandes desastres sociales". Quién se queda mirando a una chica mientras se cambia?
Vergüenza: Oh, qué horror. Nunca vamos a poder mirarla a la cara de nuevo. ¡Esto es el fin de nuestra reputación, si es que alguna vez tuvimos una!
Tristeza: Tal vez nunca nos perdone. Lo único que lograremos es que nos odie para siempre... O peor, que nunca quiera hablarnos...
Alegría: Vamos, sabemos que podemos hacerlo. TN tiene habilidades sociales... algunas... ¿verdad? Si lo manejamos bien, podemos salir de esto con dignidad. Quizás hasta con una historia divertida que contar... algún día."
Furia: -golpeando la consola con fuerza, haciendo que salgan chispas- Esto es RIDÍCULO! Tenemos que arreglar esto AHORA! ¡No vamos a dejar que una primera impresión desastrosa arruine nuestras vidas! ¡Lo que necesitamos es una disculpa decente, y luego... quizás un helado!
/////////////////////////////////////////////////////////////
Mientras tanto, en la casa de los Andersen, la tensión en la mesa era palpable. TN y Riley se encontraban sumidos en un silencio incómodo, ambos lanzando miradas rápidas pero nerviosas el uno al otro. Jill, percibiendo el ambiente, decidió intervenir para romper el hielo.
Jill: Riley, cariño, ¿por qué no le muestras a TN la ciudad mañana después de la escuela? Sería una gran oportunidad para que él conozca los alrededores.
Riley, quien estaba a punto de servirse una ensalada, casi deja caer el tenedor. Miró a TN, recordando la cara que había visto por la ventana, y trató de no enrojecer. TN, por su parte, sintió que la cena se volvía más incómoda de lo que ya era.
Riley: Eh, claro, supongo que podría hacerlo... No es un problema.
TN: Eso sería... genial. Me vendría bien conocer la ciudad.
Jill: Perfecto. Así que mañana después de clases, Riley te mostrará los mejores lugares, TN. Es bueno que te sientas como en casa lo antes posible.
Noah, siempre rápida para captar las cosas, intervino en el momento justo.
Noah: Eso suena muy bien. Quizás hasta encuentren algún lugar donde vendan helado... después de todo, el helado es la mejor manera de empezar una amistad, ¿no creen?
Riley y TN asintieron casi al unísono, aunque seguían un poco tensos. Noah observó a su hermano, captando una pequeña señal de alivio en su rostro, lo que le hizo pensar que tal vez, después de todo, esto no sería un desastre total.
Riley: *con una pequeña sonrisa* Bueno, entonces... nos vemos mañana después de la escuela, TN.
TN: Sí, después de la escuela.
La cena transcurrió sin problemas, aunque Noah no perdió la oportunidad de avergonzar a su hermano en cada momento posible. Jill, por su parte, mantenía la conversación fluida, y Riley, aunque algo incómoda al principio, comenzó a relajarse. Finalmente, cuando la comida terminó, era hora de despedirse.

YOU ARE READING
Nunca Te Dejaré (Riley x Male reader)
RomanceEsta historia trata de TN, un joven de 13 que acaba de mudarse con su hermana mayor Noah a una nueva casa en San Francisco.