a job poorly done

25 2 0
                                    

Cuando nombraron a Alastor rey del infierno, hubo cambios para bien y para mal, ya no era un simple Overlord si no ahora era rey y tenía mucho mas poder que en el pasado.

Había dejado su puesto y Vox lo ocupo enseguida siendo el tercero hasta ir escalando y llegar al primer puesto del más poderoso Overlord. Y ahora más que nada quería usurpar el trono para convertirse al fin en el ser más poderoso del infierno y para demostrarle a Alastor qué siempre sería el número uno, pero cuando Husk fue a buscarlo y se reunió después de tantos años con Alastor sabía que seguiría muy debajo de él ya que ahora era más intimidante a lo que fue en el pasado y no tuvo de otra que cuidar su lengua porque tenía el presentimiento que podría morir.

Era el encargado de matar a Michael, el hermano gemelo sádico de Lucifer, estuvo semanas vigilandolo y después de aquella revelación sobre que tenía prisionero a Dios, no comentó ni dijo nada al respecto ya que usaría ese secreto contra Lucifer para que le entregará el trono sin la necesidad de pelear. Fue una tarea complicada pero con arduo trabajo se presentó la oportunidad de asesinar a Michael o eso pensó.

Talves la profecía nunca hubiera ocurrido si Alastor no hubiera encargado esa tarea a Vox, tuvo que haber sido más paciente y llegar a un acuerdo sin la necesidad de matar, pero solo era un padre que quería lo mejor para sus hijos.

Cuenta regresiva para la muerte de Atticus Morningstar: 72 horas.

La catedral era una impresionante estructura gótica que se erguía en el corazón del cielo, sus paredes de piedra, las ventanas de vitrales con sus colores vibrantes y diseños intrincados permitían que la luz se filtrara en el interior, creando un ambiente de serenidad y paz. El interior de la catedral estaba adornado con estatuas de santos y ángeles, que parecían vigilar desde las sombras. El altar mayor con su retablo de madera tallada, se elevaba en el extremo opuesto de la nave y el órgano de tubos con sus teclados de marfil se alzaba en la galería del coro. El único lugar a donde Michael iba sólo y para tender una trampa. La catedral era un lugar sagrado para los ángeles ya que ahí rezaban por su padre: Dios, pero para Vox le parecía divertido no solo manchar y destruir la catedral si no también dejar el cuerpo de Michael ahí para que el cielo perdiera su fe. Sin embargo Michael siendo un arcángel poderoso y el siguiente Dios, sintió la presencia maligna de Vox para prepararse para el ataque.

Vox emergió de las sombras, su figura envuelta en un aura de energía digital, frente a él Michael oraba pero su espada de luz estaba centelleando.

— Ya me estaba preguntando en que momento darías la cara — burló Michael.

Vox sonrió, su rostro seguía distorsionado por la energía digital, no esperaba menos del hijo de Dios. Con un gesto, Vox desencadenó una lluvia de códigos informáticos que se abatieron sobre Michael como un enjambre de insectos, pero el arcángel simplemente levantó su mano y una barrera de luz pura detuvo el ataque. Michael contraatacó con una estocada de su espada, pero Vox se teletransportó instantáneamente al otro lado de la catedral, reapareciendo en una nube de pixeles. Desde allí lanzó una andanada de proyectiles de energía que Michael esquivó con agilidad. En ese momento la catedral ya no era un lugar de paz y serenidad. La batalla entre Vox y Michael estaba dejado huellas de destrucción en su interior, las ventanas de vitrales estaban rotas, los escombros de piedra y vidrio cubrían el suelo, las estatuas de santos y ángeles estaban derribadas y el altar mayor estaba dañado.

— Dime algo, ¿Vox, verdad? — retrocedió — ¿Quién te mandó? No creo que haya sido mi estúpido hermano, no tiene la fuerza y el coraje para mandar a asesinarme. Así que solo queda su maldita perra, ¿fue el no es así?

Claro que si decía una palabra moriría por el trato que hizo con Alastor así que continuo con la batalla. Vox utilizaba su control sobre la tecnología para crear ilusiones, trampas y ataques digitales, pero Michael con su poder divino y su habilidad en el combate, lograba esquivar y contrarrestar cada ataque. Vox se enfureció y lanzó un ataque desesperado, fusionando su cuerpo con la propia catedral para crear un monstruo de piedra y energía, pero Michael con una sonrisa serena, se acercó al monstruo y lo golpeó con una estocada de su espada, liberando una explosión de luz que purificó la catedral y derrotó a Vox. A pesar de la destrucción, la catedral aún conservaba su aura de santidad y majestad, era como si la propia esencia de la fe y la devoción hubiera sido puesta a prueba, pero no destruida. En ese momento la catedral parecía esperar, en silencio, a que la luz de la redención y la renovación llegara de nuevo.

Skyfall (RadioApple)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora