DEJARE TODO DE LA MEJOR MANERA

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Me despierto nuevamente algo adormilado y bastante cansado, me dormí bastante tarde pensando, ni siquiera me puedo acordar bien de lo que pensaba, realmente solo se que tengo que alistarme para ir con Eros a la casa de su abuelo, ay~... Me duele el brazo... Miro con atención y sorpresa la gran herida que al parecer yo mismo me hice con la navaja de afeitar de debajo de mi cama me duele demasiado, pero no recuerdo habérmela echo, siento como me palpitan los ojos, si quiera me desinfecte como es de costumbre? Tal vez solo la vende, por si acaso me la desinfectare con alcohol.

Agarre una toalla y empece a desvestirme para así poder meterme a bañar, no recuerdo haberme echo tantas cortadas en el cuerpo, me doy asco, soy horrible, me duele mucho. De pronto escuche un llanto el cual me helo la sangre y conjunto con eso un gran estruendo, pero no podía salir así ya que no podía dejar que mi mamá me viera así, así que rápidamente agarre un suéter me cerré el cierre y abrí la puerta, solo para encontrarme a mi madre desangrada en el piso, fue algo horrible mi cuerpo se paralizo, al mismo tiempo escuche como me arrojaron una botella de vidrio por poco y me da en la cara, voltee rápidamente solo para observar a mi padre borracho con una expresión de enojo, MALDITO IDIOTA, pensé, pero no me iba a precipitar y agarrarme a golpes así como así, se que es mas fuerte que yo ademas tiene que estar vivo para lo que tengo que hacer, pero si el idiota este abre de mas su estupida boca no se ni lo que puedo llegar a hacer pero ya me las arreglare si es que pasa eso. Solamente tengo que acercarme poco para así poder noquearlo y atarlo.

-Hijo, que haces bueno...Puedo explicarte lo que paso, pues la idiota de tu madre no quería darme mas dinero y pues es su obligación el dármelo, soy su hombre, no es así?, bueno lo que pasa es que no fue tan grave ya se mejorara, mejor ven aquí y dame un abrazo

Lo dice como si fuese la cosa mas normal del mundo, me das asco carbón, pero bueno quien soy yo para negarle un abrazo a mi querido padre....

Entonces...

Me acerco con la expresión mas hipócrita posible y me aguanto el dolor de ver a mi madre con la cabeza totalmente abierta, al mismo tiempo que me acerco veo a mi alrededor y observo un jarrón atrás de mi padre es una oportunidad, lo mejor es que lo podre noquear ya que es de barro, mientras lo abrazo bajo mis brazos lentamente hacia donde esta el jarrón y sin pensarlo, lo estampo contra la cabeza de mi padre, cae en el piso tirándome a mi también a el suelo maldición, se durmió pero me dejo la pierna atorada, con un poco de dificultad y con mi cuerpo adolorido logro levantarme, lo arrastro por el piso lo llevo a mi habitación y lo ato ahí mismo me costo bastante aproximadamente una hora y media, por fin logro meterme a bañar y rápidamente me cambio, vuelvo a revisar los nudos y me despido con lagrimas en los ojos de mi difunta madre, no pude hacer nada soy una decepción, pero de todas maneras voy a volver a ver a mi hermana ya lo dejas no importa. Perdóname por favor madre, tu me diste incluso mas de lo que nos merecíamos, si tan solo hubiese dejado mi universidad y me hubiese puesto a trabajar, lo lamento demasiado, prometo darte una vida mejor, y ahora estas muerta se que no te di mucho, pero prometo vengarte a ti también, matare a mi padre por hacerte esto.

Agarre mis cosas me seque las lagrimas y me dirijo a la casa de  Eros. Para mi mala suerte empezó a llover y tengo que correr para no mojarme, corro hasta llegar a la casa y lo veo a el tan sereno, tan calmado en la puerta esperando pacientemente viendo su celular, me percibe y me mira, primero con una cara calmada y luego con una de preocupación, se me acerco y me recogió para llevarme a su casa.

-Amigo, que te pasa? Te estas desangrando que te paso en los brazos?

-No me pasa nada estoy bien, siempre lo hago y nunca me pasa nada solo necesita cicatrizar.

-Como que siempre lo haces? Esto no es normal, te podrías morir, necesito cerrarte esas heridas, pero no tengo los instrumentos ni mucho menos mi titulo de cirujano.

Los restos de JenniferDonde viven las historias. Descúbrelo ahora