Night 003

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♖The Night of the encounter♖

La mañana siguiente, Copenhague despertaba con un cielo despejado y una brisa fresca que prometía un día perfecto para explorar la ciudad. Mary y Morgan, aún emocionadas por la aventura de la noche anterior, decidieron aprovechar al máximo su tiempo en Dinamarca

Después de un desayuno ligero en el hotel, salieron a caminar por las calles empedradas, maravillándose con la arquitectura histórica y los canales pintorescos que daban a Copenhague su encanto único

-Escuché que hay trampolines en algunas calles de la ciudad -dijo Morgan, con un brillo travieso en los ojos-. ¿Te imaginas? ¡Trampolines en medio de la calle! Tenemos que encontrar uno

Mary sonrió, contagiada por el entusiasmo de su amiga

-¡Eso suena increíble! Vamos a buscarlos

Caminaron por el centro de la ciudad, disfrutando del ambiente vibrante y la energía contagiosa de la gente que iba y venía. Finalmente, encontraron uno de los famosos trampolines incrustados en el suelo, rodeado de niños y adultos que saltaban con alegría

-¡Allí están! -exclamó Morgan, señalando los trampolines-. Vamos, Mary, muéstrame tus habilidades gimnásticas

Mary, quien había sido gimnasta durante muchos años, sonrió ante el reto. Se quitó los zapatos y se subió al trampolín, comenzando a saltar con gracia y precisión. Morgan la observaba con admiración, animándola con entusiasmo

A medida que Mary se sentía más cómoda, decidió intentar un truco más complicado. Dio unos saltos adicionales para ganar altura y, en un movimiento fluido, realizó una voltereta en el aire, aterrizando con una elegancia que solo un gimnasta experimentado podía lograr

Justo en ese momento, Christian, James y una chica llamada Adelaide caminaban cerca y notaron a Mary en el trampolín. Christian, impresionado por la destreza de Mary, aplaudió con entusiasmo

-¡Bravo! -exclamó, sonriendo ampliamente

El aplauso de Christian distrajo a Mary justo cuando estaba a punto de aterrizar de otro salto. Perdió el equilibrio y cayó de manera incómoda. Christian se apresuró a ayudarla, agarrándola con firmeza pero con cuidado para evitar que se lastimara

-¿Estás bien? -preguntó Christian, preocupado

Mary asintió, un poco avergonzada pero sin daños

-Sí, gracias. Solo me distraje por un momento

Adelaide, viendo la caída, no pudo evitar soltar una risa burlona

-Vaya, qué torpe

Morgan, al escuchar el comentario, la miró mal, claramente molesta por la falta de tacto

Christian, notando la tensión, regañó a Adelaide

-Adelaide, eso no fue necesario. Fue un accidente

Adelaide se encogió de hombros, aún con una sonrisa burlona en el rostro

-Lo siento, fue solo una broma

Christian la miró seriamente

-No todas las bromas son apropiadas

Mary, tratando de mantener la calma, sonrió a Christian

-Gracias. Solo necesito concentrarme más la próxima vez

Christian la ayudó a levantarse, aún con una sonrisa en el rostro

-Lo siento por distraerte. No podía evitar aplaudir, fue un truco impresionante

Mary sonrió, aceptando la ayuda de Christian

Copenhaguen Nights-Prince Christian-James, Earl Of WessexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora