Sangre azul
Y ahí estaba, parado entre un montón de demonios adinerados que le doblaban la altura en una fiesta que le provocaba nauseas por el terrible y único hecho de ser tortuosamente aburrida.
Blitz agradecía el estar allí con un objetivo diferente a los de la mayoría de invitados en ese lugar. Intentaba ver por encima de los presentes al príncipe aviar, pero su baja estatura le impedía ver algo más que el abdomen o pechos de alguien. Gruñó con derrota, pero sin perder el tiempo se volteó hacia una mujer de apariencia felina que platicaba con otros demonios similares.
-Disculpe señora, necesito ver algo más que sus tetas caídas-. Dijo Blitz, trepándose a la demonio gracias a su gran y esponjoso vestido.
- ¿¡Pero que!?- Exclamó la dama completamente asqueada. El alto hombre con estampado atigrado junto a ella se enderezó, amenazante.
Blitz sonrió victorioso cuando a la distancia identificó unas plumas plateadas, capa roja, alto sombrero, y ojos escarlata.
- ¡Aléjate de mi esposa, enfermo! - Gritó el furioso demonio, sujetando al imp del cuello de la camisa con agresividad.
-Si, genial. Si puedes arrojarme hacia el búho que está hablando con ese pavo estilo Elsa que obviamente es gay sería perfecto.
- ¡Tu, pequeña escoria!
Sostenía una copa de vino que movía suavemente en círculos, viendo el líquido rojo con una expresión agotada.
- ¿Por qué mi hermana no está contigo? ¿De nuevo la dejaste sola? – Preguntó con reclamo el elegante demonio de plumas blancas y celestes frente a él.
Stolas suspiró, elevando la mirada de su vino.
-Andrealphus, fue Stella quien me obligó a venir para luego desaparecerse.
Octavia se acercó a ellos, sosteniendo un plato con unos pequeños pastelitos en él.
-Los canapés están deliciosos. Deberías probar uno, papá.El príncipe platinado miró los bocadillos, sonriendo ante la buena apariencia y presentación de estos.
-Hm, si se ven muy...
Antes de poder acabar la oración y tomar uno de los pastelitos, abruptamente fue derribado por alguien que voló directamente hacia él. Ambos se estrellaron y cayeron al suelo. El príncipe, aturdido, vio sobre su pecho a un imp que respiraba agitado.
-Oh, mierda, enserio funcionó-. Murmuró este, desconcertado.
Por la repentina caída, una de las mesas se movió bruscamente y una pirámide de copas de champaña amenazaba con caer sobre ellos. Blitz, actuando con rapidez, sujetó al príncipe y rodó, evitando que las copas se estrellaran sobre ambos. El estrepitoso sonido de las copas destrozándose resonó por todo el salón, atrayendo la atención de la gente. El imp vio a su costado el desastre de vidrios rotos y líquido desparramado por el suelo, pero rápidamente sintió abajo de él, al demonio aviar que lo observaba jadeando, completamente sorprendido. Mantuvieron un intenso contacto visual, solo viéndose directamente atontados, rodeados por una atmósfera que logró ser quebrada por una voz.
- ¡Papá!
Varios guardias los rodearon. Al reaccionar, Blitz se apartó y varios de los presentes se dirigieron a Stolas, quien con ayuda de un Hellhoud se colocó de pie.
- ¿Está bien, alteza?- Preguntó el canino.
-Yo, ah, sí. Sí, lo estoy- Respondió el príncipe sonriendo nervioso, quitándose el polvo que adquirió por la caída.
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Directo al corazón
FanfictionUn asesino sumergido en la desesperación y un príncipe consumido por la soledad se conocerán bajo perversas intenciones, mentiras y secretos. Stolas contratará a Blitz tras sentir que su vida corre peligro, confiando en qué él lo protegerá Sin sabe...