AHORA Y SIEMPRE.

30

Takemichi miró la lluvia

cof _ el menor disimuló la pequeña tos

estas bien? _ se volvió para ver a Emma y asintió

solo quiero un poco de agua _ dijo, Emma asintió antes de ponerse de pie y caminar hasta la cocina y traer un vaso de agua

Toma _ la rubia le extendió el vaso y Takemichi bebió, mientras veía la lluvia, habían pasado tres horas desde que Chifuyu se había ido, y todos estaban preocupado, tres horas desde que inicio la fuerte tormenta, la cual no parecía tener un final.

¿Por qué carajos está lloviendo Tanto? _ dijo Izana

La culpa es de los idiotas_ dijo Mochi señalando a Kazutora y Baji

¿Qué quieres decir bastardo? _ interrogó Baji, estaba irritado, y enojado, se sentía culpable y tenía unas inmensa ganas de llorar, había arruinado su relación con Chifuyu, tanto el cómo Kazutora sabían que lazo o no, a Chifuyu eso no lo obligaría a quedarse con él, ese niño era demasiado orgulloso.

Esa lluvia fue creada por el estado de ánimo de Chifuyu_ dijo Naoto_ y que todavía este tan fuerte a cómo empezó eso quiere decir que todavía esta lo suficiente enojado o triste para eso_ dijo el joven con semblante serio.

No creo que podamos ir a ningún lado con tal tormenta_ dijo Takemichi poniéndose de pie y miró a Mikey _ por lo menos no hasta que Chifuyu se calme _ dijo saliendo de su lugar

¿A donde vas? _ interrogó Manjiro

no podremos irnos, asi quiere a dormir, despiértenme cuando la lluvia se calme _ el menor salió de la sala de estar

¿dormir? _ interrogó Karina

pero si apenas son las cinco _ dijo Shion

todos miraron por donde se habia ido el líder de Bonten

Chifuyu no es consciente de en qué momento empezó a llover y tampoco le importó, lo único que le importaba es que quería salir y alejarse de ese lugar, no sabe en qué momento sus lágrimas ganaron, pero estaba agradecido con la lluvia que las cubría, habían pasado horas desde que salió del edificio sentía su garganta doler, hacia demasiado frio, todavía estaba lloviendo, sus lágrimas no mermabas, sus ojos pesaban, su ropa estaba empapada y lo peor es que no sabía dónde estaba.

Estaba seguro que anochecería pronto y Chifuyu simplemente se sentó en una banca de cemento frete a un árbol en medio de la calle, no le importó la lluvia, ni la soledad de las calles, el chico lloro, en algún momento sus lágrimas dejaron de correr, ahora se sentía cansado y su cabeza dolía demasiado, el chico estaba distraído que no se percató que la lluvia mermo. Chifuyu se empezó a sentir mal, sus ojos no solo pesaban, sino que también los sentía hinchados y dolían, su garganta ahora seca a pesar de estar totalmente mojado tenía frío, le dolía la cabeza, garganta y los oídos. Chifuyu se inclinó hacia delante y puso su cabezo en sus manos, ahora estaba mareado.

¡Mierda! _ exclamó

Oye _ el rubio escuchó movió un poco su mano para ver un par de zapatos negros parados frente a él, pero el rubio no subió la mirada, sentía que, si lo hacía caería, le estaba empezando a doler todo _ ¿estas bien? _Chifuyu se estremeció cuando el desconocido toco sus espalda, por alguna extraña razón se empezó a sentir agotado, Chifuyu cayó desmayado hacia el frente, el desconocido soltó el paraguas que tenía y se aceleró a evitar la caída del rubio. _!!oye¡¡ ¡¡oye!! _ llamó nuevamente moviéndolo _ ¡mierda! _ maldijo cuando se dio cuenta que el rubio se había desmayado.

Empezó a sentirse un poco débil, como se supone que pasa esto, hasta ahora no encontrado nada que los lastime y el simplemente se esta enfermando con tos y sangre. Takemichi miró las gotas de sangre en el lavamanos, luego se miró al espejó y y lamió la comisura de sus labios manchados.

¡mierda! _ el menor suspiró y abrió la llave dejando que el agua se llevara la prueba de su malestar.

Habian pasado dos días, y tanto Bonten como Touman estaban sumidos en desesperación y preocupación, no se había sabido nada de Chifuyu desde que salió un par de días antes, de Touman, Takemichi tampoco había podido comunicarse con él, su teléfono estaba apagado, ya hicieron que barrieran la ciudad, pero nada, los alrededores, pero nada, se revisaron hospitales, cárceles y morgue, nada.

Mierda_ ese fue Baji, lucía una oscuras ojeras debajo de sus ojos, su piel estaba demacrada y sus ojos estaban rojos, habían acabado de informarle que no había nada sobre Chifuyu.

Extiendan la búsqueda a todo Kanto_ dijo Kazutora

Si señor_ dijo el hombre frente a ellos antes de salir del lugar.

Emma estaba encerrada en su habitación se culpaba por la desaparición de sus amigo, nunca debió haber dicho nada, debió haber esperado que solo estuvieran ella y Chifuyu para decírselo. Draken está preocupado tanto por la desaparición de su amigo como por el estado de ánimo de su novia, despues de que pasaran 24 horas de la desaparición de Chifuyu esta ce encerró y no ha salido ni comido nada, solo se oyen sollozos y disculpas provenientes de la habitación.

Hinata no era tan diferente a Emma, solo que esta no se culpaba. Takemichi ha estado conteniendo las ganas de masacrar y desgarrar cada parte del cuerpo de los dos ejecutivos de Touman al mismo tiempo que trataba de ocultar su malestar, habia demasiados problemas para agregar más, tanto así que ha evitado todo el contacto con los dos, hasta ahora se ha dedicado a descargar su ira en cualquiera que lo haga enojar un poco.

Por obvias razones tuvieron que informarle a la madre del chico, cuando esta llamo la noche anterior y no pudo hablar con él, la mujer les dio una semana, o ella estaría en Japón para buscar a su hijo; nadie refuto contra eso.

Ryusei Satou de dieciocho años de cabellos rosado con mechas negras, es un expandillero que vive con su madre, la cual maneja una peluquería, el chico esta es su último año de preparatoria y quiere ser estilista, no ha sabido nada sobre las pandillas desde hace más de tres años cuando era parte de la Touman, cuando era vicecapitán de la primera división; cuando lo conoció.

Ryusei conoció a Chifuyu en abril del 2004, ese chico al inicio le pareció patético y casi se ríe cuando llegó esa tarde al hospital abandonado y se declaró en vicecapitán de la primera división de Touma, pero le gusto su tenacidad, lo que no le gustos mucho es que esa tenacidad fuera todo para impresionar a su capitán, Baji Keisuke líder de la primera división de la Touman, aun así Sato nunca mencionó su interés en el rubio, luego dejó el mundo de las pandillas y se dedicó a su vida para convertirse en estilista, en las tardes después de clases ayuda a su madre en salón de belleza, todo había ido bien, no tenía preocupaciones, se dedicó a él y su madre. Ahora estaba a poco de graduarse.

Una tarde fue realmente extraño, mientras estaba en la escuela un momento eran soleado y al siguiente había una horrible tormenta a fuera, así fue por horas, a nadie se le había permitido ir a casa por lo menos hasta despues de las cinco, cuando la lluvia pareció disminuir fue cuando se les permitió regresar.

Justo unas calles antes de llegar, Ryusei divisó a alguien bajo la lluvia con la cabeza entre las manos, se acercó para mirar si estaba bien, bueno en lo que cabía, el chico frente a él se le hizo familiar, pero nunca respondió su pregunta al menos no antes de desmayarse, el peli rosado soltó su paraguas y corrió hacia él, lo volteo y sintió el aire atorarse en su garganta.

Vaya, no has cambiado nada desde la última vez que no vimos Matsuno_ dijo el chico.