Me encontraba con Alejandro en agua azul,Gamboa se encontraba con nosotros,me compré un agua fresca mientras Observaba el paisaje.
——Señorita Almonte, francamente yo no veo la necesidad de comprar máquinas nuevas—lo ignore.
—Mi idea es modernizar la fábrica para facilitar el trabajo de los obreros —informe sin observarlo.
—Los obreros estan acostumbrados a trabajar con el tipo de maquinaria que nosotros tenemos—intento convencerme,notando su nerviosismo lo mire con una ceja alzada.
—Su padre...su santo padre que en paz descanse —lo interrumpí irritada.
—Nuestro padre está muerto,ahora yo doy las órdenes,tomaría tu opinión en cuanta si está beneficiará a los obreros.
—Esta bien señorita—asenti y toque el hombro de Alejandro que se notaba embobado viendo a una rubia a lo lejos.
—Dare una vuelta y por dios Alejandro,pareces acosador,disimula tantito¿No?—lo mire burlesca.
—Ten cuidado,no te alejes mucho—ordeno—Quiero que me acompañes a algo.
—¿Que cosa?
—Quiero comprar unos terrenos y hice una cita para hablar con el dueño.
—¿Ubicación?tal vez te alcance allá.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿¡Que?!¿¡Un millón de pesos?!—exclamo mi madre incrédula,la calle con la mirada.
—¿¡Pero como es posible que le debas a ese hombre un millón de pesos, dimitrio?!¿¡Cómo piensas que vamos a pagar una cantidad así?!—me pego en la sien,quite su mano de un manotazo.
—Tengo que pagar hoy—informe alarmado.
—Ay no—se lamento tocando su frente nerviosa.
—¡Tienes que hablar con ese hombre y pedirle que te dé dos días más!—ordeno sobresaltada
—Ya hablé con el,no me va a esperar más tiempo —trague en seco—si no pago hoy,me va a matar.
La tía Carlota llegó interrumpiendo aquella discusión.
—Ya nos vamos Graciela —hablo la tía Carlota.
Graciela suspiro mirando a su hijo negando con desaprobación y enojo.
