Capitulo 7. Destellos

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Freen.

—Lo siento Heidy, pero yo no quiero hijos, no por ahora, ni siquiera sé quién soy, qué futuro tendrá un niño a lado de una persona que no tiene claro sus pensamientos.

—Y eso qué tiene amor, el problema de tu memoria no influye en que tengamos un hijo, Freen eso nos sirve para afianzar nuestro matrimonio.

—Sí lo hace Heidy, porque no estoy a gusto contigo, no sé si realmente eres mi esposa, ¿dime cuántos años tenemos de casadas, por qué no tenemos hijos aún? —Es inevitable no irritarme, tal vez sea problemas debido al traumatismo que sufrí.

—No tenemos hijos porque no queríamos hijos aún, pero yo ya estoy lista para tenerlos.

—Pero yo no Heidy, iré a la habitación de huéspedes con permiso.

—Freen, ya he soportado mucho tus desplantes, después del accidente no me has tocado, siento que me besas por obligación, soy tu esposa y debes una vida conyugal, debes cumplirme como la esposa que eres —dice con enojo.

—Lo siento Heidy, no soy la misma mujer no te has dado cuenta, no me apetece tocarte, no me provocas, no puedo cumplirte como mujer, lo lamento —digo mirándola a los ojos. —Descansa.

—Todo es por esa mujer verdad, ella es la causante de esto desde que apareció me tratas como si no valiera nada para ti, he esperado paciente para que seas esa mujer de hace meses atrás y esto es lo que recibo.

—En eso te equivocas, ella no tiene nada que ver en esto y más te vale que la dejes en paz y fuera de todo esto, nuestros problemas son nuestros y aquí entre nosotras estamos —salgo de la habitación y me dirijo a la habitación de huéspedes.

No se que me pasa, desde el accidente no me siento igual, pero con Becky hoy al besarla fue tan fascinante sentir sus labios sobre los míos, ella despertó todo en mí, algo que Heidy no hizo, es como si mi cuerpo le perteneciera solo a ella.

—Becky que eras para mí —recuesto mi cabeza en el respaldo de la cama.

Se que debió ser algo para mí, sí sentí todas esas sensaciones solo con sus besos quiere decir que éramos más que solo asistente y jefa.

—Ya Freen en algún momento todo será aclarado, en algún momento todos esos recuerdos vendrán a tu mente —me acomodo y cierro mis ojos.

Me miró al espejo, la imagen de una mujer aparece detrás de mí, su vientre está abultado giró hacia ella y acarició su vientre, me inclino y lo beso.

—Hola mis niños como amanecieron hoy —le hablo al vientre de la mujer. —muero por verlos, tenerlos en mis brazos —sonrió, debajo de mi mano siento como se mueven los bebés. —tengan cuidado pueden lastimar a mamá —digo mirando a la mujer, pero no logró ver su rostro debido a la luz. —mamá y yo queremos verlos ya —digo con entusiasmo.

—Aún no amor, faltan dos meses —dice ella con voz dulce que me hace suspirar.

Depósito más besos en su vientre, y me pongo de pie acarició su rostro, me acerco más para besarla pero de pronto ya no estamos en la habitación donde nos encontrábamos sino que estamos en un cuarto lleno de escombros, miró a todos lados hasta que mi mirada se posa en él cuerpo de la misma mujer con la que estaba hace un momento, pero que ahora yace en el piso. Me acerco a ella, su cabello castaño es una maraña y su rostro está brilloso, me acerco a ella.

—Te voy a sacar de aquí mi amor —le digo.

—Freen—su grito me deja estática y de pronto todo se oscurece.

Las consecuencias de esa noche 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora