Las consecuencias de esa noche 2

Capítulo 12. ¿Qué ocurrio entre nosotros?

Freen.

—¿Por qué no me dijiste que éramos madres? ¿Por qué los escondiste? Becky—le reprocho, mientras ella solo me mira.

—No me reproches, tú no tienes idea por todo lo que pasé.

—Lo siento amor, pero es que son mis hijos Becky, nuestros hijos, tenía derecho a saber —digo con decepción.

—Sí Freen, tenías derecho a saber, no pensaba esconderlos por siempre, pero tampoco podía llegar y decirte Freen tenemos dos hijos, si tú ni siquiera recuerdas que estaba embarazada, me ibas a tomar como una loca —sonrió.

—Tienes razón pero ¿Cuándo pensabas decírmelo?

—En cuanto tuvieras más confianza en mí.

—Becky, amor confío en ti ciegamente.

—Pero hace días atrás para ti era solo tu asistente —tiene toda la razón para mí hace una semana era solo la asistente que renunció sin decirme las razones de su renuncia. —Tienes razón amor disculpa.

—Descuida, lo importante es que ya sabes de la existencia de tus hijos —me mira y luego a los niños. —iré a prepararles el biberón —anuncia saliendo de la habitación.

Miró a mis hijos, creo que estoy soñando, son tan hermosos quiero saber todo acerca de ellos, me hubiera gustado estar en su nacimiento, sus controles, como fue que me perdí todo estos meses de sus vidas.

—Perdonen a mama por no estar con ustedes todo estos meses, por no estar en su nacimiento —algunas lágrimas se me escapan, Becky entra a la habitación, coloca los teteros en una de las mesitas. —Quiero que me cuentes todo el proceso del parto —me mira con tristeza, toma a Aleksei. —también quisiera que me hablaras de lo que teníamos antes.

—¿Estás segura?

—Sí, por favor.

—No quiero que te abrumes con ello, para decirte lo que sucedió entre nosotras tengo que explicarte muchas cosas.

—Quiero saberlo todo Becky, y más si es de ti y mis hijos, por favor si me siento mal te lo haré saber.

—Está bien. ¿Qué quieres saber primero?

—Cómo fue que quedaste embarazada de mí, no hace mucho tuve recuerdo de tu embarazo pero no fue mucho.

—Es algo loco sabes —me mira. —Te acuerdas que te hable del bar y que hay fue nuestro primer encuentro.

—Sí.

—Bueno esa noche estábamos ebrias, así que nos fuimos a un hotel, estuvimos juntas y de ello hubo consecuencias, estás dos hermosas consecuencias —dice acariciando la manita de Aleksei.

Mi ceño se frunce, al escucharla a mi mente se me viene la incógnita de qué si le fui infiel a Heidy.

—Después de esa noche pasaron muchas cosas, no quería acercarme a ti porque pensé que estabas con Heidy, lo que no sabía era que estabas en procesos de divorcio —sigue narrando y aclarándome la incógnita. —el día que me dijiste de tu divorcio también te enteraste de la existencia de nuestros hijos —me mira. —después de un mes y algo empezamos a vivir juntas —mira a un punto fijo y sonríe. —Empezamos a vivir una vida de pareja, un día salí de compras y pasó lo impensable, fui secuestrada —me mira, las lágrimas inundan sus ojos.

La sangre se me calienta, empiezo a sentir enojo.

—¿Dónde estaba yo? —digo sintiéndome impotente.

—Ese día tenías reunión con papá.

—¿Quién te secuestró? —le pregunto, me mira, es como si estuviera pensando su respuesta. —¡BECKY DIMEE!

—Necesito que te calmes Freen, y no se si me vas a creer si te lo digo —mira a Alessia, que toma su biberón como si no hubiera comido en todo el día.

—Becky, cuando te digo que me cuentes todo, quiero todo lo que pasaste en mi ausencia, sin olvidar ningún detalle.

—Si lo quieres saber está bien, te diré todo lo que que pase ese día —termina de sacarle los gases a Aleksei y lo mete a la cuna. —Fue Heidy, junto con un hombre, ella me inyectó un calmante que me dejó fuera de sí, me llevaron a una bodega abandonada y ahí me volvió a inyectar algo, el doctor dijo que era oxitocina, se utiliza para inducir el parto, fue horrible todo lo que pase ese día Freen, además de eso también me drogaron —en este momento estoy perpleja.

No puedo creer que Heidy haya hecho eso, ella no es así, puede ser muy persuasiva pero ella no le haría daño a nadie.

—Se que no me crees, porque tu mente solo recuerda a esa Heidy que era pulcra, pero no tienes idea de que ella fue capaz de hacer para separarnos —las palabras de Erick, Jefferson y Harry se me vienen a la mente. —Eres libre de creerme sé que lo recordarás.

—Ten cuidado con Heidy, no sabes de lo que es capaz —esa advertencia empieza a resonar en mi mente nuevamente.

—Lo estoy no te voy a mentir, es que no recuerdo que Heidy fuera así, pero aunque mi mente no lo quiera aceptar te creo Becky.

—No se como llegaste a ese lugar, pero ya para ese entonces estaba con contracciones, cuando me viste corriste a mí, te acercaste, pero Heidy te golpeó la cabeza con un pedazo de hierro, el hombre que andaba con ella te sacó de lugar para cuando papá entró —Becky seca sus lágrimas, me acerco a ella y la abrazo. —No supe nada de ti, a mi me llevaron al hospital donde me hicieron una cesárea de urgencia, si no la hubieran hecho hubiera perdido a los gemelos, y por causa de todo eso Alessia estuvo internada en neonatología por asfixia, estuvo casi un mes—me levanto de la cama de golpe y paso mis manos por la cabeza, estoy furiosa, y a la vez siento impotencia.

¿Cómo fue que permití que sucediera todo esto? ¿Quién es Heidy en realidad? ¿Qué clase de persona es ella, esa no es la mujer que simula ser mi esposa, ni es la mujer que conocí hace años? ¿Por qué permití que ella les hiciera daño a ellos?

‍​‌‌​​‌‌‌​​‌​‌‌​‌​​​‌​‌‌‌​‌‌​​​‌‌​​‌‌​‌​‌​​​‌​‌‌‍—Becky amor —niego. —Yo me siento.. es que no tengo palabras para describir lo que siento en este momento, siento impotencia, enojo conmigo misma, porque no te puse seguridad, porque no fui contigo..

—Sí tenía seguridad Freen, pero ellos no podían entrar al baño y no se donde estaban en ese momento, todo fue tan rápido —camino hacia ella y la abrazo.

A mí mente viene aquel recuerdo de cuando ella entró a mi habitación, se veía diferente.

—Perdóname por no estar para ti en esos momentos difíciles amor, perdóname —niega, seca mis lágrimas.

—No Freen, estabas en coma y no podías hacer nada.

—Aún así Becky me siento una miserable, no los merezco, pero juro amor que ella va pagar y la persona que la ayudó pagará también...