SIMPLEMENTE UNA MIRADA [TojiIta]

Capitulo II

Yuuji es un ser de luz eso todas las personas que lo conocen lo sabían, se ha mudado de casa y colegio, admite que extrañara a sus amigos más el sabe que estos simplemente se juntaban con él, por sus hermanos, Sukuna, su gemelo y Choso. Sus hermanos sabían de esto y por más que advertían a Yuuji y le dijera que mandara a la mierda a esas personas él no escuchaba, él no es una mala persona. No es cómo sus hermanos que no les importaría decirle sus verdades a algunas personas.

Su madre había fallecido hace dos años, cada día la extrañaba. Su padre Jin al perder a su Omega y más perder el lazo cayó en depresión, los tres hermanos se las empañaron para salir adelante y cuidar a su padre. Más Sukuna con su carácter no aguanto más la deplorable situación en la que estaba su padre, un día se armo de valor e interrumpió en su habitación, lo agarro del cuello de la camisa.

—Ya van meses, casi un año de que estás así padre. Si mamá aún estuviera aquí estaría muy decepcionada de tí. —Yuuji y Choso llegaron corriendo a la habitación queriendo detener a su hermano, más llegaron tarde.

—Sukuna... —Choso avanzó unos pasos.

—¡No! —Ninguno de los dos podía ver el rostro de su hermano a excepción de su padre—. Mamá se ha ido, yo sé que en algún momento conoceré a mi Omega o mi futura pareja y si está falleciera. Por supuesto que le guardaría luto, más tampoco abandonaría a mis hijos a su suerte —La voz de Sukuna sonó quebrada, la habitación se llenó de un tétrico silencio, el gemelo mayor no era de demostrar sus emociones, en el velorio de su madre tampoco se le había visto llorar, guardando su dolor cómo siempre lo hacía.

A pesar de crecer en una familia amorosa él era el más cerrado con sus emociones y sentimientos.

—Suku-ni —Esta vez habló el gemelo menor, Yuuji. Observó a su padre quién seguía con la mirada en agachada, su rostro parecía estar en shock, tratando de procesar lo que su hijo le había dicho. Tardo varios segundos para por fin caer en la realidad.

—Yo...yo lo siento chicos —Con la voz quebrada pudo reunir el valor para hablar—. Es qué, simplemente la perdida de su madre me afectó mucho, realmente pido perdón por haberlos dejado aún lado —Observo con lágrimas en sus ojos a sus hijos, por fin liberando el dolor que también habia estado reteniendo, Choso y Yuuji no dudaron en acercarse y abrazar a su padre con un Sukuna ocultando a toda costa que estaba llorando, aferrándose a su padre—. Perdóneme, enserio. Lo siento tanto, más a tí mi precioso, Yuuji.

Ninguno dijo nada, solo seguían abrazados grupalmente, felices y tristes a la vez. Jin sabía que si quería superar la muerte de su Omega debían alejarse de los recuerdos que mantenían en esa casa, claro que recordaria cada momento como buenos recuerdos pero, sabía que no sería bueno para él.

—Chicos... —Los gemelos, y Choso observaron a su padre, a la expectativa de cualquier cosa—. Empiecen a recoger sus cosas, nos mudaremos. Solo si están de acuerdo.