Fragmento #1

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Fragmento #1 de la investigación de Lorraine

"Había una vez... un Dios que se apiadó de una bella mujer, cuya voz era tan hermosa que sus melodías desgarradoras podrían conmoverte hasta las lágrimas o llevarte hasta la más absoluta locura.

El completo desinterés por la vida humana, su soledad y miseria, era lo que quedaba de lo que fue una dama que lo tuvo todo y no le quedaba nada.

No se le puede llamar cobarde a un alma que necesita ayuda y en su lugar solo recibe duros golpes prejuiciosos, una dama hermosa que perdió a su familia saltó del risco más cercano después de recibir todo tipo de maltratos.

La mujer espero que sus pulmones se llenaran de agua, realmente quiso que su pecho se oprimiera dolorosamente e involuntariamente tragara agua intentando vanamente respirar, que su consciencia se perdiera y su cuerpo se hundiera para nunca ser encontrado.

Sin embargo, pudo abrir los ojos y presenciar el vasto océano con una nueva visión que le permitía ver cómo si estuviera bajo el sol de la mañana, los pies llenos de cicatrices fueron reemplazados por una cola y su esbelto cuello estaba adornado por branquias.

No más dolor ni tristeza, no sentía rencores ni angustias, su humanidad se perdió mientras ella nadaba en busca de un nuevo "hogar"

Con su voz aún más cautivadora, cómo si fuera un embrujo, empujo a marineros desprevenidos, mujeres incautas y niños inocentes a caer al mar, para que aquellos suficientemente fuertes, dispuestos a olvidar, formaran parte de su "familia".

Así nació Atlanta, un reino que desde sus inicios estuvo manchado con egoísmo, muerte y rechazo a la memoria.
Un lugar donde se perdían a si mismos para formar parte de un falso paraíso..."


Maldición del marDonde viven las historias. Descúbrelo ahora