Speak Now! ─ Spreen +18

05

─ Dale, no seas boludo ─ estaba riendo.

Le dije a Iván tratando de safarme de su agarre, pues me quería manchar con helado.

─ No, vos empezaste, mira como estoy todo manchado ─ me mostró su cara algo manchada por el helado de chocolate.

─ No fue mi intención, te lo juro ─ dije haciéndome la buenita, claramente mi plan si era mancharlo.

─ Bueno, mira allá ─ le hice caso.

Aprovecho y me mancho.

─ Por boluda ─.

¡Tarado!.

Después de estar un rato en el parque, nos fuimos hacia su casa.

─ ¿Querés ahora si ver Cars? ─ le dije mientras acariciaba su pelo.

Tiene un pelo muy lindo y suave.

─ No, ¿Vos que querés ver? ─ me dijo mientras acomodaba mejor su cabeza en mi pecho.

─ Te juro que si quiero ver Cars ─ puse cara tierna, nunca me falló esa cara.

Me dió un beso.

─ Si vos decís — dijo mientras abría un poco más el escote de mi top, con su cara, ya que se encontraba recostado ahí y se acomodaba aún más en mis senos.

Sonreí satisfecha de lograr mi cometido.

─ Hace un toque más de frío ─ le dije mientras me acurrucaba aún más en su cama.

Que clima más bipolar, hace un rato hacía calor, ahora hace frío, en fin.

─ Vení ─ me acerco aún más a él, puso sus manos debajo de mi top negro.

Solte un quejido, sus manos estaban frías, pero aún así no me desagrada su toque.

Coloqué mis manos en su pelo y nuca, acariciándolo.

─ ¿Me pasas el control? Porfa ─.

Después de ver Cars uno, nos pusimos a dormir por insistencia mía.

─ Nena, levántate ─ sentí unas leves caricias en mi rostro.

─ ¿Es muy tarde? Quiero seguir así ─ le dije adormilada, mientras lo abrazaba aún más a mí.

─ No importa, que hora es ─ me abrazó gustosamente.

Después nos fuimos a mi casa.

                                                    ﾟ☆ *.☽
                                                        Speak now

Semanas después.

Iván pov's

Estar así era el mismo paraíso, nos encontramos en la mañana para ir a desayunar a una nueva cafetería.

Cómo no después de un rato se fue a dormir, ya que según ella no estaba respetando sus horarios de sueño y el sueño era vital para su vida.

Luego se levantó, después de almorzar, estábamos nuevamente acostados en mi cama.

Resulta que mis padres y los suyos se llevaron tan bien, que en las próximas semanas nos estuvieron invitando a distintos eventos. Obviamente no desperdiciaría la oportunidad de verla.

Ahora teníamos la confianza suficiente, cómo para que ella venga a mi casa y no pensaran nada raro.

¿Y Vico? Prefiere estar con sus amigas, que asistir, y eso me da más oportunidades para estar a solas con Evangeline.