Goku x tsunade (caminos cruzados)

Capítulo 6 "Recuerdos y Promesas Rotos"

El aire en el lugar parecía haberse congelado, un silencio inquietante se apoderó del ambiente mientras Goku observaba con horror cómo aquellos rostros deformados se acercaban cada vez más.

Sus bocas abiertas en gritos silenciosos y sus ojos vacíos transmitían una desesperación que calaba hasta los huesos.

El suelo, cubierto de un líquido negro, se desgarraba bajo las uñas de las figuras que se arrastraban, indiferentes al daño que se infligían en su desesperación por llegar hasta el joven Saiyajin.
Era una visión que perturbaba el alma.
Goku se quedó paralizado, sin poder apartar la vista de aquel espectáculo grotesco.

Cada figura que se acercaba a él se desintegraba en un charco de líquido negro. Desde la distancia, una figura se mantenía firme, destacando entre la masa de sombras.
Un hombre alto de piel azulada observaba, mientras todo sucedía a su alrededor.

La tensión en el aire se sentia. Goku, sin saber qué hacer, finalmente reunió el valor para hablar, su voz apenas un susurro tembloroso.

-Dis... -intentó decir, pero fue interrumpido abruptamente.

-Dime, Goku, ¿qué pensaste que ocurriría? -La voz del hombre azul resonó, profundamente en el eco de la habitación obscura-. ¿Por qué no respondes?

El joven guerrero no entendía a qué se refería aquel extraño, buscaba desesperadamente una respuesta. Entonces, una figura borrosa, casi idéntica a él, emergió de entre la sustancia viscosa .

-Lo siento -murmuró la silueta, sus palabras impregnadas de tristeza.

-¿Lo siento? -repitió el hombre azul con un tono que rozaba la incredulidad-. ¿Por qué lo sentirías? ¿Es por las incontables vidas que perecerán debido a tu ansia de luchar? ¿De verdad creíste que podrías jugar con fuerzas que superan tu entendimiento?
Un silencio abrumador llenó la habitación.

Goku permaneció inmóvil, su mirada fija en la figura que se desvanecía frente a él, dejando tras de sí una sensación de vacío que le atenazaba el corazón. Finalmente, el hombre azul rompió el silencio, su voz cargada de una mezcla de tristeza y reproche.

-No recuerdas nada, ¿verdad?

Goku negó con la cabeza, su voz apenas un murmullo cuando respondió:

-No... no recuerdo nada.
El hombre azul suspiró, su mirada se suavizó ligeramente mientras observaba al Saiyajin con una especie de lástima.

-Era de esperarse -dijo con resignación-. Cuando te envié allí, estabas al borde de la muerte. Ni siquiera sabía si sobrevivirías al teletransporte.

La ira se apoderó de Goku, sus puños se cerraron con fuerza mientras gritaba, incapaz de contener su frustración.

-¡¿Por qué?! ¡¿Tu me trajiste aquí?! ¡¿Por qué lo hiciste?

El hombre azul permaneció en silencio, sus ojos reflejando una calma imperturbable que contrastaba con la furia de Goku.

-Fue a petición de una amiga -respondió finalmente, su voz serena.

-¿De qué amiga hablas? -preguntó Goku, desesperado por obtener respuestas.

El hombre señaló hacia el suelo con su brazo restante. Goku siguió la dirección de su dedo, y lo que vio lo dejó paralizado. Una figura femenina, apenas reconocible, se arrastraba hacia él, su cuerpo deshaciéndose lentamente en un líquido oscuro mientras repetía su nombre una y otra vez.

-Goku... Goku...

Las palabras, cargadas de una tristeza infinita, resonaron en el alma de Goku.

Él la miró, con lágrimas brotando de sus ojos, incapaz de comprender la magnitud de lo que estaba sucediendo.
Su corazón se rompió al ver el estado en que se encontraba aquella mujer, y sin pensarlo, se lanzó hacia ella, tomándola en sus brazos con desesperación.