No quiero que me dejes ir,
no dejes que me vaya,
no sueltes mi mano, dejando
que el aire borre mis llamas.
Y no entiendo qué haré después
si escapas de entre mis manos,
escabulléndote como agua
entre mis dedos. Todo en vano.
¿Y qué haré una vez que el fuego
se haya extinguido de mi piel?
Dejando entonces a mis ojos
ver, dando todo a entender.
Déjame vivir como la luz
que alumbra tus noches en vela
que al dormir caliente tus labios
y deje su humo el olor a cera.
Calor emanado esa noche,
bailando el fuego y agua juntos.
Evaporando con ese beso
fugaz, mudo, en un segundo.
11/08/2024
ESTÁS LEYENDO
El llanto profano [poemario en curso]
Poesía"Si un poema no ha destrozado tu alma; no has experimentado la poesía." - Edgar Allan Poe.