Entre Sombras y Esperanza el amor que vençe (Cançelada)

capítulo 5

Las semanas pasaron después del último desafío que Rias impuso a Goku. Aunque él había soportado la prueba con una sorprendente fortaleza, el desprecio y la crueldad de Rias no mostraban signos de disminuir. La relación entre los dos hermanos permanecía tensa y llena de dolor, con Goku continuando su vida en un estado de sufrimiento constante.

Una noche, mientras Goku estaba en su habitación tratando de descansar, escuchó un suave golpe en la puerta. Cuando la abrió, se sorprendió al ver a una de las sirvientas de la mansión, quien lo miraba con preocupación.

"Señor Goku," dijo la sirvienta con un tono preocupado, "la señora Rias ha pedido que se le acompañe a la sala principal. Ella ha dicho que tiene algo importante que discutir con usted."

Goku, aunque temeroso, asintió y siguió a la sirvienta hasta la sala principal. Allí, Rias estaba sentada en un trono elegante, rodeada por sus seguidores. Su mirada era fría y calculadora, y Goku podía sentir la tensión en el aire.

"Goku," comenzó Rias con un tono imperativo, "me alegra verte aquí. He estado pensando en lo que has pasado y he decidido darte una última oportunidad."

Goku se acercó, su corazón latiendo con nerviosismo. "¿Qué tipo de oportunidad es esta, Rias?"

Rias se levantó del trono y se acercó a Goku, su expresión aún llena de desprecio. "He creado un desafío final, uno que te permitirá demostrar tu valor. Si lo superas, te daré un poco de paz. Si fallas, las consecuencias serán peores de lo que has enfrentado hasta ahora."

Goku se preparó mentalmente para lo que estaba por venir. "Haré lo que pueda. Solo quiero que entiendas que no importa cuánto me hagas sufrir, siempre estaré aquí por ti."

Rias sonrió con crueldad. "No esperes compasión. Este desafío será diferente. Te enfrentarás a un ser demoníaco creado para destruir tu voluntad. Tendrás que derrotarlo para ganar esta última prueba."

Goku fue conducido a una arena especial dentro de la mansión, donde un poderoso demonio estaba esperando. El ser demoníaco tenía una apariencia aterradora y emanaba una energía oscura. Rias observaba desde una plataforma elevada, con una expresión de satisfacción en su rostro.

El demonio atacó a Goku con una ferocidad implacable. Sus golpes eran fuertes y rápidos, y Goku tuvo que esforzarse al máximo para defenderse. Cada ataque parecía más brutal que el anterior, y el dolor que sentía era casi insoportable.

"¡Vamos, Goku!" gritaba Rias desde su posición, disfrutando del espectáculo. "Demuestra lo que eres capaz de hacer. No te será fácil salir de esto."

A pesar del dolor y la desesperación, Goku luchaba con todas sus fuerzas. Su determinación era inquebrantable, y su amor por Rias seguía siendo su mayor motivación. Sabía que debía enfrentarse al demonio con toda su fuerza, no solo para su propia supervivencia, sino para demostrar que su amor no era en vano.

Después de una larga batalla, Goku, exhausto y herido, logró derrotar al demonio. Con gran dificultad, se levantó y se dirigió hacia Rias, su cuerpo temblando por el esfuerzo.

"Lo hice," dijo Goku con voz rasposa. "He enfrentado el desafío que me pusiste. ¿Ahora qué?"

Rias lo miró con una mezcla de sorpresa y desdén. "No puedo negar tu fuerza y tu determinación, Goku. Has superado el desafío. Pero eso no cambia mi opinión sobre ti. Solo significa que has probado que eres lo suficientemente fuerte para soportar más."

Goku, aunque derrotado y cansado, se mantuvo firme. "No esperaba que cambiara tu opinión de inmediato. Solo espero que, algún día, puedas ver más allá de tu crueldad y entender el amor que te tengo."

Rias se volvió y comenzó a alejarse, su expresión aún imperturbable. "Nunca esperes que cambie. Mi posición y mis sentimientos son firmes. Pero has demostrado ser más fuerte de lo que pensaba."

Goku se quedó en la arena, sintiendo una mezcla de agotamiento y esperanza. Aunque Rias no mostró arrepentimiento ni cambio, su amor por ella seguía intacto. La lucha constante y el sufrimiento que enfrentaba no habían logrado debilitar su espíritu.

La historia de amor y desdén continuaba, con Goku enfrentando cada desafío con una fe inquebrantable y Rias manteniéndose en su actitud arrogante y cruel. La dinámica entre ellos seguía siendo dolorosa, pero Goku nunca dejó de esperar que, algún día, Rias pudiera comprender la profundidad de sus sentimientos.