Pequeños Genios.| Nara Shikadai

Especial 1K

Los quiero

Los Samurais de la aldea de la hoja se encontraba en la aldea de la Arena, cansados de tanto caminar, su líder Uzumaki Boruto buscaba el distrito Rojo en busca de acojo y diversión.

—Oe Boruto no tengo ganas de pasar por ese lugar.—El estratega no estaba de animo para estar con mujeres—. Aparte tengo que hacer el informe.

—Vamos no seas fome Shikadai, será solo un rato.—La emoción estaba en todos los hombres del grupo—. En una de esas encuentras una linda chica.

—No me interesa.

—Lo sabemos Genio.

Al mirar el lugar se notaba que habían entrado en zona roja, muchas mujeres lo saludaban y habían muchos puestos de comidas, todo el grupo seguía a Boruto que parece que se sabía este lugar como la palma de su mano, después de caminar por un rato llegaron a un lugar grande y fueron recibidos por un señora rubia pero mucho más mayor que todos ellos, parece que era la dueña del lugar porque Boruto y ella hablaron un rato y después nos dejaron pasar, nos dijeron que para servicios especiales con las mujeres era otro precio pero lo que estábamos pagando venia incluido licor junto un baile y una actividad para cada uno de nosotros de nuestra elección. Cada uno de nosotros nos sentamos en su lugar, nos trajeron un poco de Sake una mujer de pelo negro y corto, parece que Boruto la conocía porque la saludo y le dijo que la esperaría.

—Cierto que es linda.

—Define linda.—Todos nos reímos por el comentario de Inojin—. Que es broma hombre, pero ella no es mi tipo.

—Como omo sea mejor para mi.

Todos negamos y nos quedamos callados cuando escuchamos música, habían dos Geizas tocando y aparecieron dos mujeres bailando, la primera era de pelo morado junto una linda vestimenta pero no cautivo mi atención, la segunda era una mujer de tez morena y un poco rellena que tampoco llamó mi atención, escuchaba como todos gritaban y ellas se movian por toda la sala pasando entre cada uno de nosotros, la chica que servía el Sake creo que se llamaba Sarada me vino a servir más y avisar que después de ella venia otra bailarina. Después de un rato cada bailarina se sento junto algunos de mi compañeros, yo puse propina y me pare para irme.

-—Vamos Shikadai no me digas que ya te vas.—Solo asentí—. Al menos ve a la última y te vas porque igual pasaste dinero.

—No me interesa el dinero.

Después de aceptar me volví a sentar y cuando comenzó la música la vi a ella, no era muy alta, traía unas joyas que llamaban mucho la atención junto su color de pelo rosa, y su traje descotado dejando a la imaginación a los hombres, el traje que traía era muy lindo y llamativo, pero su cara me mato parecía una muñeca tan frágil, sentía que de un toque se podía romper. Se movia al compás de la música pero sus ojos nunca veían al público y eso me causo curiosidad, cuando terminó de bailar se estaba por ir pero la llamé, ella se giro y me sonroje nunca había visto una mujer tan hermosa, pero antes de que ella fuera donde mi la dueña del lugar me miró.

—Tienes el suficiente dinero para pasar una noche con mi Oiran principal.—Solo la mire y asenti—. Entonces es toda tuya.

Ella camino hacia mi y cuando la tenia cerca sentí como algo dentro de mi se quemaba.

—Buenas noches, me presento soy Akira y te acompañaré en esta noche.—Su voz sonaba triste y sus ojos demostraban pena—. En que le puedo servir.

—¿Sabes jugar Shogi?—Ella solo asintio y yo comencé a ordenar la piezas—. Al parecer eres la principal de este lugar.