Donde en pleno siglo XXI, un reino alejado llamado Orion es atacado por un pueblo rival a causa de desacuerdos entre sus pobladores.
Han Jisung, proveniente de Orion, debe huir de su reino con la mínima esperanza de seguir viviendo, pero cae en un...
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Cuando Minho y Jisung volvieron de su pequeña aventura juntos hasta la cabaña, no tardaron en ser notados por la pareja dueña del hogar.
Entraron por la puerta, riendo juntos escandalosamente, sin percatarse de las ojeadas que le daban el matrimonio que vivía en ese lugar.
Felix los miraba algo sorprendido, ¿Por qué? Porque notó que ambos chicos tenían el cabello mojado, y él estaba seguro de que ese día no había llovido.
El rubio, al captar la situación, dio un giro de 180 grados para mirar a su esposo, que estaba detrás de él igual de sorprendido.
Cauteloso, se acercó al oído del pelirrojo.
— Podría jurar que se odiaban...— Habló en voz baja el pecoso.
— Te prometo que yo también.
Dicho esto, Felix volvió a girarse mirando junto a su esposo al par que entró por la puerta de su casa.
— Bienvenidos, chicos...— El rubio se veía ansioso por poder saber qué ocurrirá entre esos dos, llamando la atención de los chicos— Veo que... Sí recibiste tus cosas, Minho.
Habló refiriéndose al bolso con lo último.
— ¿Ah...? ¡Oh! Sí, gracias, Felix.— Habló Minho con indiferencia.
Demonios, necesito saber qué ocurrió. Pensó Felix. No quería sacar sus suposiciones tan rápido.
Pero pensó en algo rápidamente.
— ¡Han! Han, Hannie, necesito tu ayuda en algo, ¿Vendrías? Porfis.
El chico mencionado miró de inmediato al hada notando la urgencia en que lo acompañara.
— Ah, bien, sí, no hay problema.
Al decir eso, se acercó a paso tranquilo a Felix, pero el chico al tenerlo cerca no perdió el tiempo y lo arrastró del brazo hasta la cocina.
— Han, suelta la sopa, por favor, ¿Qué se traen?
Jisung no evitó mostrarse confundido por la actitud del chico de pecas, por lo que alzó una ceja en busca de alguna respuesta.
— Vamos, dime, tan sólo...— El chico acercó una de sus manos al cabello algo húmedo de Han— Ví que ambos tienen el cabello mojado y... Algo pasó, ¿No?
Felix sonrió de manera ladina, trataba de sacarle información a Jisung, pero lo único que logró es que el chico se ruborizara.
¿Eh? ¿Qué está pensando?
— No, Felix, no ocurrió nada de lo que crees de verdad, no fue nada de eso, te lo prometo y...
