Vincent estaba con los nervios por las nubes, colgó la llamada del alcalde y dejó caer el teléfono sobre su escritorio, agotada.
Se frotó la cara con ambas manos antes de levantarse de su asiento, caminando hacia la ventana de su oficina, abrió las cortinas, y allí estaba
El origen de todos sus males estos meses, una enorme nave espacial, de tonos grises metálicos. Un casi perfecto trapecio tridimensional estático en lo alto del cielo de nueva york.
Llevaba allí meses, irritándola, obligándola a evacuar toda la ciudad.
Los ataques con misiles, aviones, artillería pesada, nada funcionaba, habían intentado todo. Y no es que la nave fuera indestructible, el problema estaba en su campo de fuerza, ningún ataque lograba encajar en los muros de la nave, ninguno llegaba. La milicia atacaba pero antes de que sus proyectiles tocaran el metal un campo de fuerza, mayormente invisible, resaltaba en tonos verdes lumínicos que detonaban todo lo que le lanzaban.
Su teléfono vibró y al ver el dibujo de una tortuga con una bandana morada respiró hondo, atendiendo.
— Donatello... dime por favor que tienes buenas noticias, el estado está considerando seriamente atacar la nave con misiles nucleares, sin importarles la gente de dentro, volaran la ciudad entera. —Explicó de prisa.
— Jefa Vincent, tengo más que buenas noticias, incluso creo que podemos rescatar a los civiles que secuestraron hace unos meses. —Le informó la tortuga al otro lado de la línea, Rebecca no sabía que cara poner, estupefacta salió de su asombro sacudiendo el rostro.
— Dios santo, comenzaba a creer que estaba todo perdido... ¿Qué necesitan?
— Ya fabriqué un dispositivo capaz de abrirnos un hueco en el campo electromagnético que rodea la nave, el plan es ingresar, meterme en el sistema de la nave, rescatar a los civiles y averiguar cómo podemos... ya sabe, derrotar a los malos. —Vincent asintió.
— Bien ¿Entonces?
— Necesitamos transporte aéreo y que preparen todo para atender a los civiles, no tenemos idea de que pueden haberles hecho o en qué estado se encuentren.
— Bien, conseguiré todo ¿Cuándo empezamos?
— Mañana temprano, si le parece bien, queremos prepararnos lo mejor posible, dentro del campo no tenemos idea de que haya, no es Krang, eso seguro... su sistema era mucho más fácil de hackear.
— Bien, los espero mañana, tendré todo listo... ¿Al alba?
— Si, nos vemos entonces.
— Adiós.
Vincent colgó la llamada y bajó el teléfono. Hace dos meses esa cosa en el cielo había secuestrado unas cincuenta personas, o al menos luego del primer ataque se confirmaron cincuenta desaparecidos.
Suspiró, dos meses allí, quizá ya los hubieran matado a todos, pero prefería mantener la esperanza.
Debía hacerlo, era lo correcto.
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Imperio Romano | Oc x TMNT | Las tortugas ninjas
FanfictionLos temores y pesadillas de muchos ciudadanos de Nueva York se hicieron realidad, los extraterrestres han vuelto, y esta vez pretenden fusionarse con los humanos. Cuando la nave llegó al cielo neoyorquino, luego del primer ataque, hubieron al menos...