Momentos de guerra 2

35 3 4
                                    

Hola, volví después de mucho tiempo 😅. Pensé que esto no llegaría tan lejos, pero me he dado cuenta de que hay gente que de verdad está disfrutando de esta historia. Los quiero mucho, aprecio sus mensajes en TikTok, en Instagram y aprecio sus comentarios aquí. Los adoro. Tal vez mi libro no sea famoso, pero puedo decir que estoy haciendo las cosas bien. VOLVIMOS

Ah y no se porque pero wattpad me esta cambiando los guiones largos — por cortos - disculpen no es error mio

Desperté en el hospital. Me dolía todo, absolutamente todo, pero aun así me levanté de la camilla y salí de la habitación. Afuera había muchos guardias y demasiada gente herida, lo cual me desanimó un poco. Lo primero que hice fue preguntar por mis hermanas y ir a verlas.

-Eres un hipócrita, lo peor, Maximiliano -ese fue el recibimiento de Fer cuando entré en la habitación.

-Yo también te quiero.

-¿Pues yo no? ¿Cómo crees que voy a querer a alguien que pone a su novia caprichosa por encima de sus hermanas? Eso no es justo, Max. ¿No ves a Afi? Está entubada por tu culpa.

-No es mi culpa.

-Tenías que quedarte con nosotras.

-Tenía que ayudar a Abigail.

-¿Y nosotras? ¿No necesitábamos ayuda? ¿Qué demonios te pasa? Sabes que metiste la pata cuando tu hermana de once años te está reclamando de una manera tan fría.

-Perdón.

-No quiero tus disculpas, no me sirven de nada cuando mi hermana mayor está hecha mierda en una cama de hospital. Me decepcionaste, Max.

-¿Y qué querías que hiciera, que dejara a mi novia morir por ustedes?

-Se supone que somos más importantes que esa maldita rubia -Fer se veía muy enojada.

-Más cuidado.

-Y una mierda. Sabes lo que me da ganas de matarte, Max. No mereces ser parte de nuestra familia. Mira mi mano, está destrozada por tu culpa. Tal vez si te hubieras quedado a nuestro lado, esto no hubiera pasado.

-No es justo que me eches la culpa a mí. No fui yo quien le pegó el tiro a Afi.

-Tal vez no fuiste tú, pero cuando me dijiste que gritara tu nombre si te necesitaba -empezó a llorar-, lo hice. Grité tu nombre muchas veces y tú no fuiste a ayudarnos. Se supone que eres mi hermano mayor, que tienes que cuidarme, y no lo hiciste. Tenía fe en que nos eligieras a nosotras.

¿Qué se supone que se hace cuando traicionas la confianza de una de las personas que más quieres en el mundo? ¿Cómo se recompensan esas cosas? ¿Qué haces cuando metes la pata así? Pero no me dolían tanto las palabras; más me dolía la razón que se encontraba en ellas, la manera en la que mi conciencia empezaba a torturarse de manera horrible. Ella solo hace eso cuando la razón de los demás pesa más que mi ego.

-Prometo no volver a hacerlo.

-Prometí volverme tan fuerte y poderosa que no tendré que volver a necesitarte para que me cuides nunca más. Y sal.

-Fer...

-Fereàr, ese es mi nombre y así me llamarás de ahora en adelante. Y lárgate con la rubia inútil esa.

-Princesa...

-¡No quiero que me llames así! ¡LÁRGATE!

Antes de salir, le di una última mirada a Afi, que se veía muy frágil dormida en esa camilla. Me resigné y fui a donde Abigail. Pensaba que estaría dormida o mal, pero todo lo contrario. Ella estaba sentada en un sofá texteando por su celular de una manera muy animada y con una sonrisa en el rostro.

Los hijos de los elementos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora