Esa señora no merece ser tu mamá

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Narrador: sayda

Ayer habíamos llegado a la comunidad y me sentía sola ya que tenía el cuarto para mí sola ya que James y Margaret habían decidido irse a vivir solos. Me alegro por ellos, se ven muy felices juntos

—Sayda, puedo entrar —grito mi papá desde afuera

—Si papá

El entro y tenía cara de serio osea que está conversación iba a ser sobre mi escapada con Cameron

—Hija Se que estuve con mentirte con lo de esa señora...

—Mi mamá

El se quedó mirandome y luego asintió con la cabeza. La verdad no esperaba este tema pero me alegra que lo haya sacado ya que me parece que lo tenemos que hablar

—Si tu mamá. Pero debes entenderme ya que es muy difícil criar a una hija solo

—Esta bien papá, no te culpo de nada pero... Eso no quita el hecho de que me mentiste —le dije a mi papá mirándolo fijamente y ya estaba notando que se me estaban aguando los ojos

—Hija, se que todo esto para ti ha sido difícil pero yo vine a hablar de tu castigo —dijo algo incómodo entonces supe que no quería hablar de este tema pero yo si lo quería hablar

—Claro mi castigo —le dije mientras negaba con la cabeza— ¿porque siempre me evades cuando quiero hablar de mamá?

—PORQUE ESA SEÑORA NO MERECE SER TU MAMÁ SAYDA, EXPERIMENTO CON IRENE Y CONTIGO

—Pero eso no quita el hecho de que es mi mamá

Yo ya estaba llorando porque es difícil hablar de esto ya que era verdad. Mi mamá experimento con Irene y conmigo

—Sayda, hija entiende que esa señora no se merece que la llames madre —me dijo mientras se estaba tratando de calmar

—Tal vez no lo tenga pero si hay algo que no se me olvida nunca es cuando me enseñaste los mandamientos de Dios y uno de ellos es horar a padre y a madre por mas malos que hayan sido

—Dios mío sayda Hasta Mercedes fue...

—No, Mercedes nada y no me la vuelvas a nombrar

El simple hecho de que la nombrará me daba un dolor de estómago

—Sayda no me cambies el tema, ¿porque te escapaste en primer lugar?

—Porque si no te diste cuenta Alessandro me dijo monstruo y todos ustedes me hicieron creer uno

—¿Yo? Si yo lo único que he hecho últimamente es trabajar y casi no te puedo ver

—Eso no es nada nuevo

El estaba dando vueltas a la habitación pero cuando le dije eso se detuvo y me miró fijamente

—Sayda si yo trabajaba era para darte lo que más quería y un mejor futuro y creciste con buenas niñeras

Solté una risita irónica  y las lágrimas ya salían solas

—Pero yo no quería una muñeca o un teléfono último modelo o siquiera ropa... Yo quería a mi papá el cual solo veía los fines de semana y lastimosamente gracias ello fui criada por niñeras

En ese momento él iba a decir algo pero alguien tocó la puerta

—Sayda, cariño el desayuno está listo —dijo loris al otro lado de la puerta

—Ya bajo, gracias por avisar —le dije y escuché sus pasos alejándose

Mire a mi papá y me limpie las lágrimas y salí ya que no quería que nadie viera que estaba llorando.

años en sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora