Lover | Ona Batlle

Capítulo 026: Sonreír a la cámara

"García, ¿cómo te ha ido con Jorge?".

Miro a Jorge y a las cámaras, él me devuelve la mirada con una sonrisa malvada. Suspiro antes de mirar hacia la cámara.

"Ha sido genial, Jorge está tan decidido a entrenar a nuestro equipo a la victoria y es simplemente increíble de ver"

Él sonríe antes de dar las gracias, yo pongo mi cabeza en mi mano mientras a Vilda le hacen una pregunta. La verdad es que no escuché ni una palabra de lo que dijo este hombre porque todo era falso para que sonara increíble.

Sabía que las chicas estarían viendo esto confundidas por mi elección de palabras y mis elogios hacia el entrenador, pero no podía decirles la razón detrás de eso. Si se enteraban, el mundo se enteraría.

"¿García?" pregunta un entrevistador lo miro confusa.

"¿Te pregunté sobre tu relación con Ona?"

"Ah vale" me río torpemente "No creo que haya mucho que decir, seguimos con nuestras vidas juntas y ya está"

"¿Así que sos o no sos una 'cosa'?"

"Oh lo somos" me rasco la nuca antes de girarme para mirar a otro hombre que hizo más preguntas.

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Una vez terminada la entrevista, subo a la habitación de hotel que compartimos Ona y yo y veo que está dormida, me tumbo a su lado y la atraigo hacia mí mientras cierro los ojos.

Cuando me despierto, Ona está hablando por teléfono, gimo antes de sentarme un poco y arreglarme el pelo, ella me mira con una pequeña sonrisa.

"¿Dormiste bien?"

"Mhm" tarareo antes de frotarme los ojos y levantarme de la cama. Luego me pongo los zapatos y me preparo para salir a correr un poco.

"Volveré pronto" le grito para que me oiga

"Vale" la oigo responder y abro y cierro la puerta antes de bajar las escaleras y empezar a correr.

Corrí hacia la zona boscosa del hotel donde se alojaba el equipo y admiré la fauna por el camino. Había un canguro, hembra por lo que parecía, tumbado cerca del camino durmiendo. ¿Son tan tranquilos? Es una locura. Siguiendo el camino había unos cuantos bancos y merenderos que era super bonito, tengo que traer a Ona alguna vez.

El resto de la carrera se me hizo un poco aburrida y después de una hora decidí volver a la habitación y refrescarme un poco.

Subí corriendo las escaleras hasta llegar a nuestra puerta y llamé aparentando que se me había olvidado la tarjeta-llave.

"Onaa", gimo mientras miro por la mirilla y la veo riéndose.

"¿Cuál es la palabra mágica?".

Se burla de mí y suspiro antes de negar con la cabeza, avergonzada.

"¿Por favor?"

Es entonces cuando la puerta se abre lentamente y la figura aparece orgullosa de sí misma, pongo los ojos en blanco bromeando mientras sonrío antes de darle un beso en la mejilla y agarrar un chándal nuevo para ponérmelo después de la ducha.

"¿Cómo estuvo tu trote?" Me pregunta mientras se envuelve a mi alrededor

"Estuvo bien gracias Mi amore" le contesto agarrándola de las manos, me tumbo en la cama con ella y hablamos un rato más antes de pasear por el hotel molestando a la gente

"Jenni" golpeo su puerta continuamente mientras me río.

"¡Vete!" Ella suplica mientras ríe también.

"No se puede" responde Ona tocando también y pronto la puerta se abre y una molesta Jenni se para ahí enojada.

"Nuestro trabajo aquí ha terminado", nos reímos antes de salir corriendo hacia la puerta de al lado.

"¡Alexia!" Grito mientras golpeo

"¿Sí? ¿Estás bien?" pregunta Alexia mientras abre la puerta preocupada, Ona saltó y la roció con agua y salimos corriendo.

Hicimos esto unas cuantas veces más antes de bajar a comer algo. Ambas conseguimos algo de pasta y nos sentamos en una mesa cuando las chicas sospechosamente nos rodean... nos miramos confundidas.

De repente, estamos empapadas.

"Ehh", grito conmocionada mientras miro hacia arriba y veo cómo me cae otro globo de agua en la cabeza.

Las chicas se rieron y Ona también, yo agarré un globo que no explotó y se lo metí en la cara antes de reírme y salir corriendo.

¿Oops?

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