Capítulo 020: Preparación

168 23 2
                                    

A lo largo del mes, Ona y yo habíamos hecho las maletas para la Copa del Mundo. Ambas teníamos grandes expectativas y cualquier cosa que no fuera eso era un fracaso. Incluso si ganábamos la Copa. La emoción nos recorría el cuerpo cada día y dentro de dos días la emoción se haría realidad, estaríamos en el avión rumbo a Australia para comenzar nuestro viaje de éxito o fracaso.

"Estoy tan nerviosa" susurra desde detrás de mí, le agarro fuerte de los brazos mientras sigue rodeándome con ellos.

"Lo sé, pero todo irá bien" sonrío.

"Tienes razón" me devuelve la sonrisa.

"Siempre tengo razón", bromeo, y ella pone los ojos en blanco riendo.

Me levanta y me lleva a la cama, donde me tumba. La miro confusa.

"Deberías echarte una siesta" dice desconfiada

"Vale..." Me río nerviosamente y ella me sonríe inocentemente.

Me planta un suave beso en los labios antes de bajar las escaleras, la oigo revolver una bolsa y eso es todo. Como estaba bastante cansada, dormí un poco, y fue tranquilo saber que no había nadie roncando detrás de mí.

****

"¡Despierta!" Oigo gritar a la morena, me incorporo y me froto los ojos, va vestida elegante.

"¿Qué pasa?"

"Te lo explicaré cuando estés lista Bonita" sonríe. "Solo vístete bien"

"Claro" sonrío asustada antes de levantarme de la cama y buscar un bonito vestido que ponerme, después de alisarme el pelo y cambiarme por fin estaba lista para la sorpresa de Ona.

Cuando bajé las escaleras ella estaba escribiendo algo, parecía importante desde donde yo estaba, pero no tenía ni idea de lo que había planeado

"¿Estás bien?" Le pregunté.

"Sí, ¿por qué?" Ella responde

"Por nada" sonrío antes de esperar a que se acerque y se ponga los zapatos

"Por cierto, estás muy guapa" sonríe y yo me sonrojo un poco

"Y tú también Mi Amore"

****

Subimos al coche y ella nos lleva a un bonito restaurante, una vez entramos nos llevan a una mesa y nos dan los menús.

"Gracias" ambas sonreímos antes de mirar lo que había para comer.

Nos decidimos por la pasta, ya que las dos éramos muy quisquillosas con la comida. En cuanto a las bebidas, yo pedí zumo de manzana y ella limonada, lo que nos provocó reacciones encontradas, todos los demás estaban bebiendo vino tinto, lo que nos hizo parecer extrañas.

Pronto salió la comida y ambas nos miramos sorprendidas de lo grande que era en comparación con los otros restaurantes en los que hemos estado.

"Jesús" susurra con las cejas levantadas, me río un poco antes de tomar un bocado.

"Es bueno", sonrío.

"Lo parece", se ríe mientras me señala la barbilla, me la limpio avergonzada antes de intentar avanzar en la conversación.

De vez en cuando la veía mirarse el bolsillo, pero no le daba importancia.

Charlamos un rato y, después de lo que parecieron siglos, por fin terminamos de cenar, nos desplomamos en nuestras sillas con cara de derrota. Bueno, yo sí.

"Ferdinand" dice sentándose y aclarándose la garganta.

"¿Sí?"

Saca una cajita con 2 anillos, ambos eran preciosos

"No te voy a proponer matrimonio, no te preocupes" se ríe "son anillos de promesa"

"Son adorables"

"Los tengo para demostrarte que eres la única persona que quiero... cómo te traté en el pasado fue estúpido y asqueroso y lo siento de verdad" suspira "Te amo García y por eso quiero darte este anillo"

"Yo también te amo" sonrío y ella me pone el anillo en el dedo antes de ponerse el suyo.

"Gracias por lo de esta noche" susurro cogiéndole la mano.

"Por supuesto" sonríe antes de pedir la cuenta para poder irnos.

Volvemos al coche y nos vamos a casa aparentando que las dos estábamos hechas polvo y que mañana no pararíamos de hacer maletas.

****

Caminamos hasta el dormitorio y nos tumbamos juntas como de costumbre, me pongo de lado y cierro los ojos quedándome dormida.

Me desperté con el sonido de risas y la pantalla de un teléfono, me doy la vuelta y miro para ver a Ona jugando a este juego de gatos al azar.

"Ona, amor, ¡son las 3 de la mañana!" Susurro apresuradamente.

"Oh lo siento Bonita... ¡No sabía que estabas despierta!" Ella susurra de vuelta y hace una pausa en su juego.

"No pasa nada, la próxima vez no te rías", me burlo.

"Pero tiene gracia", dice avergonzada y yo le beso la mejilla antes de volver a darme la vuelta.

"Buenas noches... de verdad"

"Buenas noches"

⬇️⭐️⬇️

Lover | Ona BatlleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora