Capitulo 27. Noches largas

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William

— Estás bien— pregunto Matteo.

Me dolía la cabeza, creo recordar que me dio un fuerte mareo y colapse pero tengo el recuerdo de que alguien cuido de mí pero vi que era Park, creo que alucine Matteo está aquí. Incluso me preparo algo de comer, y medicamentos. Pero en mi alucinacion bese a Park pero si no es Park y aqui está Matteo eso significa que ¡¡¡lo bese!!! Creo que ahora sí me pase.

— siii estoy bien puedo preguntarte algo— el asintio.

Trague fuerte dios voy a morir de vergüenza— ah acaso hice algo que no debi— el negó.

Me acerque a él, creo que no me dirá la verdad debo aprender a amarme y comenzar de nuevo, acaso lo que estoy pensando es algo loco.

— Ok ven vamos tienes que comer por qué si no vas a estar en etapa de descomposición— dijo fulminante, creo que si lo bese pero me gustó el beso por qué pensé en Park.

He vuelto a caer!!!!!

[...]

Gracias a los cuidados de Matteo que siempre vino a verme pedi un justificante médico así que no asistí a clases. Pero si podré ir a la fiesta de Ace justamente hoy, Matteo está aquí comiendo conmigo, si no voy me va a matar o me mandara a traer para que correr el riesgo.

— Te ves mejor, si que eres fuerte... voy a cambiarme a mi casa y de ahí nos vamos juntos— asentí estába rico lo que cocino no pensé que fuera un excelente chef.

Y con lo glotón que soy me acabo todo.

— Está bien pero vete con cuidado— le guiñe el ojo y él se sonrojo.

— Si... bueno pues cuando acabes yo lavo los platos— negué rotundamente.

— Yo lo hago, mejor apúrate en arreglarte. Gracias por cuidar de mi Matteo eres muy lindo.

— ¿Seguro?— asentí, se que ha sido muy lindo de su parte cuidar de mí pero es necesariamente creo que debo cuidar de mi esto fue por qué no he comido bien el doctor que me atendió me regaño, por suerte ya me siento bien.

Matteo se fue y yo me quedé lavando, luego intenté dormir pero no pude, así que mejor me bañe y me vestí, rápidamente era tarde,  saque mi teléfono y Matteo me envió un mensaje que ya estaba abajo. Cogí las llaves del auto y salí, está claro que mi aspecto es mejor por qué parecía que me iba a disecar. Baje hasta el estacionamiento, y Matteo lucia muy bien, su cabello estaba ondulado, llevaba unos pantalones ajustados color negro y una camisa púrpura, yo llevaba algo similar pero lleve un chaleco negro que combinaba bien era un toque nuevo. Matteo se acercó y me abrazo.

Correspondí a su abrazo. Note que llevaba sombra de ojos y un poco de labial en los labios, ver sus labios y recordar que lo bese cuando estaba enfermo en la bañera me hace sentir fatal, si que toque fondo, subimos a mi auto y ya íbamos a la fiesta. Desde que llegué aquí ellos disfrutan mucho el tiempo.

Llegar fue rápido, deje el auto en el estacionamiento enfrente, subimos por el elevador y llegamos. Tocamos a la puerta pero no fue necesario ya que estaba abierta , muchos ya habían tomado, estaban como que mareados, mientras otros bailaban otros coqueteaban. Cómo la primera vez que vine.

— Han llegado— dijo Ace.

—  Te trajimos esto— le entregué dos bolsas de regalo.

— Gracias...pasen tomen lo que quieran.

Matteo me dio un vaso de agua.

— Es una locura llegamos a tiempo pero parece que ya están hasta el límite— menciono Matteo.

La melodía del amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora