ᴀᴍᴏʀ ᴏᴅɪᴏ - 𝐽𝑒𝑛𝑛𝑖𝑒 𝑅𝑢𝑏𝑦 𝐽𝑎𝑛𝑒.

Ep. 99

Moon Soo-ji.

[...]

Una vez llegue a mi cuarto, estuve durante una hora entera tumbada sobre la cama mirando hacia el techo sin razon ninguna.

Hasta que luego encontré una botella de alcohol en la pequeña despensa en la que lo único que hice fue servirme en un vaso y comenzar a beber sin pensar.

A este punto ya estaba ebria, y ni Eliza ni Jacob saben de esto.

Daba vueltas por todo el cuarto con el vaso lleno nuevamente, mi mente seguía pensando en lo mismo durante todo el día. En todos esos mensajes.

Sobre mi otra mano tenía mi teléfono con el chat puesto sin saber que poner o que hacer.

Cada vez que la llamaba saltaba el buzón de voz.

Comenzó a hacerse un nudo sobre mi garganta muy doloroso, al mismo tiempo que mi corazón comenzaba a dolerme. Intenté tragar aquel nudo, pero volvía a aparecer más doloroso.

Pronto sentí mis mejillas arder, mis ojos se cristalizaron al mismo tiempo que arrugaba mi rostro a punto de caer en llanto, luego de no haberlo hecho en todo el día.

Me senté sobre el borde de la cama y sin pensarlo comencé a escribir.

Jen❤️

Está bien si nunca me amaste...

No pienso pelear contigo, ya me dijiste todo.

Pensé que me amabas, pero si de verdad no lo haces, no pienso discutir cuando mi amor no es correspondido

No seguiré detrás tuyo ahora que el contrato se terminó.. tranquila, desempacare mis cosas de tu casa cuando tú estés trabajando, así no me verás la cara de estúpida...

Gracias por tu amor falso, porque yo de verdad me ilusione..

Ni siquiera le llegaban los mensajes, solamente quedaban con el primer tic. Hasta que caí en cuanta que su foto de perfil no se dejaba ver, ella me había bloqueado al primer segundo luego de enviarme el ultimo mensaje.

Tan solo darme cuenta de eso y caí en llanto.

Lágrimas se dejaban caer sobre mis mejillas, arrugaba mi frente y fruncía mis cejas cerrando mis ojos con presión. Sollozaba en silenció por intentar aguantarme y dejar de llorar, pero era imposible.

Más lágrimas seguían cayendo.

Mis manos comenzaron a temblar un poco. Solté mi teléfono dejándolo caer al suelo y directamente me obligué a beber todo lo que quedaba en el vaso, hasta dejarlo completamente vacío sin ninguna sola gota.

Dejé caer el vaso vacío sobre el suelo, lo raro fue que no se rompió ni siquiera.

Pase mis manos sobre mis mejillas e intenté limpiar todas esas lágrimas que seguían saliendo sin parar.

Mis sollozos comenzaron a salir con más dolor, y ya era imposible mantenerme en silencio.

Tape mi rostro con una mano mirando hacia abajo y agachándome de seguida lentamente hasta quedar sentada sobre el suelo con mis piernas flexionadas y juntas. Me apoye sobre la barra que sostenía el colchón y seguí sollozando sin parar mientras pasaba mis manos sobre mi pecho de seguida sintiendo todo ese dolor.