Rebeldes Jugando Con El Amor!

48 - Relaciones Falsas

Rous y Erick en multimedia

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#Rous

Ahora ando de novia con este chico, diría que es un plan muy loco pero peores shows me he montado.

Salgo junto a mi hermana Marcy de la casa para ir cada una a su CQ, lo que no contaba era con la presencia de Erick en el frente de mi casa.

– Ay, qué chico tan lindo –. Comento mi hermana. Yo aún seguía procesando – ¿Quién será? –.

Al estar junto a él me saludo: Buenos días amorcito –. Y me cegó con tanta energía y dulcura.

En mi rostro se leía claramente "Que mierda"

– ¿Lo conoces? –. Pregunto Marcy.

– Un gusto, soy su novio –.

– Aaahh! –. Empecé a gritar de la nada, es qué todo era tan raro.

Entiendan, no estaba preparada mentalmente para este plan. Ni para que alguien dijera que era mi novio.

– Ah, tu eres Erick –. Sonrió la pequeña.

Reí, ahora el asombrado es él.

– Mucho gusto, soy Marcy, la hermana menor de Marina –.

Es que mi hermana es como mi diario andante, le cuento todo, por eso si alguien tuviera que escribir mi historia sería ella. Cada noche sea lo que sea que esté haciendo ella, yo estoy a su lado narrandole mi día a día.

Y tal cual un diario, ella no opina ni dice nada. Solo escucha y rie de vez en cuando.

– ¿Tu hermana sabe el plan? –. Estaba ya dirigidome al colegio con el pecoso.

– Si, pero no le podría importar menos. Es como si no le hubiera contado nada –.

El asintió y tomo mi mano.

– ¿Qué haces? –. Le dije viendo lo que hacía.

– Rous somos pajera ahora, debemos tomarnos las manos –.

– Esto es solo un montaje, lo haremos cuando alguien nos vea –. Lo solté.

– Mi linda Rousita, si vas hacer algo, hazlo bien –. Volvió a tomar mi mano – Por eso vine hoy a buscarte como lo haría un buen novio –. Me sonreía.

Nadie sabía de esta farsa, a excepción de mi diario andante. Es que para llevar a cabo un plan entre menos personas sepan, es mejor.

Cuando estaba llegando a la casa del rubio, el ya me estaba esperando. Con una sonrisa alegre nos saludo, luego su mirada se dirigió a nuestras manos y parecía la pintura El grito.

– No puede ser, cuando? Ustedes –. Tartamudeaba. Luego se hizo el desmayado sobre la grama.

Corrimos a levantarlo.

– Ni una palabra Thomas –. Sentencie y aunque seguía confundido hizo caso cuál perrito obediente.

... Cuando estábamos llegando a la CQ.

– Ves? Thomas se lo creyó –. Susurro.

– Estás de broma, lo raro hubiera sido que no se lo creyera. Con lo despistado que es... –. Le respondí a espaldas del rubio.

– ¡Chicos! –. Saludo Thomy a Day y Riqui que estaban llegando.

Se acercaron, nos analizaron de arriba abajo mientras su expresión de indiferencia no cambiaba nada.