Retorno.

Capítulo 30.

'En unos años, la información sobre el desarrollo de las habilidades será conocida en todo el mundo. Ellos también se darán cuenta del potencial del poder que poseen. Estar en el ejército habría sido un entorno aún mejor para su desarrollo.'

Quizás no estaría de más dejar algunas pistas temprano y ganarse su favor.

Yuder era una persona que había logrado avanzar un poder relacionado con atributos, que era notoriamente difícil de desarrollar, a varios niveles y alcanzar el nivel más alto.

Existía un dicho que afirmaba que nadie entendía el mecanismo de las habilidades poseídas por los Despertadores mejor que Yuder Aile, el Comandante de la Caballería.

El potencial para el desarrollo futuro, que incluso los propios Despertadores aún no habían comprendido, se manifestaba para los ojos de Yuder con la claridad de leer las ramas de una huella.

Tomó una decisión rápidamente y abrió la boca.

"En mi opinión, es una habilidad muy impresionante, pero parece que subestimas tu poder."

"¿Subestimar? ¿Acaso no lo acabas de ver? Es una llama que ni siquiera puede chamuscar un solo cabello de un monstruo. ¿Qué tiene de impresionante?"

Emon rió como si hubiera escuchado un chiste gracioso, agitando la pipa que emanaba humo en su mano. Yuder, sin una pizca de sonrisa, abrió la boca nuevamente.

"Podrías sentir eso si estás tratando de chamuscar el cabello de un monstruo. Pero, ¿qué tal si enciendes tu llama en el ojo o la boca de un monstruo durante una pelea?"

"..."

La pipa de Emon, que había estado sacudiendo ligeramente, se detuvo. La sonrisa casual en el rostro de Sunz también desapareció en un instante.

"Tu llama es como una chispa de piedra, corta y estallando con potencia. No es como un gran fuego del que debas preocuparte por mantener; puedes seguir intentándolo según sea necesario."

Yuder los miró fijamente mientras continuaba.

"Si te acostumbras a invocar la llama más rápido, más frecuentemente, como golpear una piedra repetidamente, podrías potencialmente encender docenas, si no cientos de lugares simultáneamente. ¿Aún sientes que tu poder es insignificante?"

"...Nunca lo he pensado de esa manera."

Emon tartamudeó, con el rostro consternado.

"Pruébalo si no lo has hecho. Eso sin duda será posible pronto. Y Sunz."

"¡Oh, sí!"

Sunz, que había estado observando la lección que Yuder estaba dando a Emon, respondió instintivamente con precisión militar.

Era como si estuviera en presencia de un superior, pero ninguno de los tres encontraba nada extraño en ello.

"La habilidad de localizar enemigos en la oscuridad es una habilidad de reconocimiento impresionante. Practica regularmente sentir más allá de lo que ves con los ojos cerrados. A medida que tus sentidos se agudicen, tu habilidad se desarrollará gradualmente. Podrías ser capaz de extender el rango de tu visión o incluso ver selectivamente solo lo que deseas."

"¿Cerrar los ojos... y practicar?"

"Si no entiendes lo que quiero decir, intenta cerrar los ojos ahora."

Las palabras de Yuder llevaban el poder persuasivo forjado por años de servicio como comandante. Por alguna razón, Sunz sintió que estaba obedeciendo una orden y cerró los ojos sin darse cuenta.

"¿Ves algo?"

"No, no ahora. Nada en absoluto....."

"Cuando usas tu habilidad, ¿tienes que concentrarte mucho?"