Capítulo 595: Antes de que salga el sol (7)

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Choi Jung Soo se empujó contra el suelo para poder levantarse.

"...¡Tan fácil!"

Estaba expresando sus pensamientos en voz alta.

Choi Jung Soo levantó la cabeza y miró hacia delante. Choi Han estaba allí de pie, sujetando su espada con un agarre flojo.

'¿Cuantas veces ha sido?'

Había dejado de contar hacía mucho tiempo.

Se había enfrentado a Choi Han tantas veces que era imposible contarlas, pero aún así no podía ganar.

'¡Solo la punta de su ropa...! ¡Ganaría si pudiera tocar siquiera la punta de su ropa!'

La forma en que Choi Jung Soo pudo derrotar a Choi Han fue cortando incluso un milímetro de la punta de la ropa de Choi Han.

Pero olvidémonos de la ropa de Choi Han, Choi Jung Soo ni siquiera había podido bloquear la espada de Choi Han adecuadamente durante los últimos días.

"...Puaj."

Su puño cerrado temblaba.

Fue por su enojo hacia sí mismo.

Escuchó una voz tranquila en ese momento.

"¿Al menos están comiendo adecuadamente mientras pelean?"

Los hombros de Choi Jung Soo se estremecieron.

No se había dado cuenta de que alguien había aparecido. Su cabeza se giró con urgencia hacia el origen del ruido.

Choi Jung Soo y Cale hicieron contacto visual.

"...Estás cubierto de polvo."

Choi Jung Soo miró hacia otro lado después de escuchar la voz sin emociones de Cale.

Choi Jung Soo parecía un desastre en este momento.

Su ropa y su cuerpo estaban cubiertos de polvo y empapado en sudor. Lo más importante era que sus ojos estaban inyectados en sangre y tenían un aspecto terrible.

Choi Jung Soo era consciente de lo terrible que se veía en ese momento.

Por eso evitaba el rostro tranquilo de Cale.

Escuchó la voz de Choi Han en ese momento.

"Nos aseguramos de que coma todas las comidas. También me aseguro de que reciba los nutrientes adecuados en cada comida".

La expresión de Cale se volvió extraña.

"Maldito cabrón. Tiene buena pinta."

Choi Han se veía completamente bien sin ni siquiera una gota de sudor.

Cale recordó cuando vio a Choi Han entrenando a los niños Lobo.

Los niños se parecían a Choi Jung Soo en ese momento.

"Pero no está herido en ninguna parte."

La mirada de Cale se movió hacia la pared contra la que se había estrellado Choi Jung Soo.

No era un muro de piedra normal, sino una pared con un suave cojín encima.

Esa pared era la única que tenía una abolladura mientras que las otras paredes de piedra no mostraban ningún signo de daño.

'También lo alimenta a tiempo y se asegura de que reciba los nutrientes adecuados'.

La complexión de Choi Jung Soo era buena para alguien que estaba atravesando un programa de entrenamiento difícil.

BOOK I: UN HÉROE NACE 3.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora